Contenido
- 0.1 Ni caminar ni correr: los mejores ejercicios para los mayores de 65 que sufran artritis, según los expertos
- 0.2 Ni pesas ni bandas elásticas: el mejor ejercicio de fuerza para que los mayores de 65 fortalezcan sus músculos
- 0.3 La rutina de María Pombo para tener unos glúteos perfectos: los ejercicios clave que nunca perdona
- 1 Dile adiós a la máquina de piernas: estas 10 alternativas funcionan mejor
- 1.1 Sentadillas búlgaras
- 1.2 Zancadas caminando
- 1.3 Step-ups con peso
- 1.4 Sissy squats
- 1.5 Wall sits (sentadilla isométrica)
- 1.6 Pistol squats asistidas
- 1.7 Leg extensions con banda elástica
- 1.8 Sprint en cuesta o escaleras
- 1.9 Sentadillas frontales con barra o mancuerna
- 1.10 Jump squats (sentadillas con salto)
Si llevas un tiempo entrenando en el gimnasio, seguro que conoces bien la clásica máquina de extensión de piernas. Es fácil de usar, se enfoca directamente en los cuádriceps y suele estar libre cuando el resto del gym está a reventar. Pero si somos sinceros… también es una de esas máquinas que se vuelven monótonas con el tiempo, y que no siempre aportan lo que parecen.
Cada vez más entrenadores recomiendan dejar a un lado las máquinas guiadas y apostar por ejercicios funcionales, más completos y adaptables. No se trata de demonizar las máquinas de piernas, sino de abrir nuevas posibilidades para trabajar el tren inferior con mayor libertad, activando más músculos y evitando patrones de movimiento artificiales. Además, muchas de estas opciones puedes hacerlas en casa o al aire libre, sin necesidad de equipo.
Dile adiós a la máquina de piernas: estas 10 alternativas funcionan mejor
Si estás buscando nuevas formas de entrenar piernas sin depender siempre de la extensión de cuádriceps en máquina, aquí tienes 10 alternativas a las máquinas de piernas que no sólo activan bien el músculo, sino que además mejoran tu equilibrio, coordinación y fuerza real. Pruébalas, combínalas y dale a tu entrenamiento de piernas un aire completamente renovado.
Sentadillas búlgaras
Este ejercicio no sólo activa intensamente los cuádriceps, sino que además exige equilibrio y control. Solo necesitas un banco o una silla baja para apoyar una pierna hacia atrás, mientras flexionas la otra hasta que el muslo esté paralelo al suelo. Cuanto más vertical mantengas el torso, más sentirás los cuádriceps. Puedes hacerlo con mancuernas o solo con tu peso corporal.
Zancadas caminando
Un clásico del entrenamiento funcional. Las zancadas dinámicas no sólo trabajan los cuádriceps, también implican glúteos, isquios, core y estabilidad de tobillos. Además, al avanzar paso a paso, se simula un patrón de movimiento mucho más natural que en una máquina. Puedes añadir peso o incluso combinarlo con un press de hombros si buscas intensidad extra.
Step-ups con peso
Subir a un banco alto o a una caja es un ejercicio muy completo que activa intensamente las piernas. Es perfecto para sustituir la extensión de piernas, sobre todo si mantienes el control al subir y bajar, sin impulso. Puedes variar la altura o hacerlo con mancuernas para trabajar en diferentes rangos de fuerza.
Sissy squats
Este es probablemente el ejercicio más parecido a la extensión de piernas… pero sin máquina. Con el cuerpo inclinado hacia atrás y los talones elevados (puedes usar una cuña o unas pesas planas), bajas manteniendo las caderas extendidas. La activación del cuádriceps es brutal. Eso sí, exige buena técnica y movilidad, así que empieza despacio.
Wall sits (sentadilla isométrica)
Aunque parezca sencillo, aguantar en posición de sentadilla contra la pared durante 30, 45 o 60 segundos hace que los cuádriceps ardan como con pocas cosas. Es un ejercicio sin impacto, perfecto para terminar una rutina o para entrenar la resistencia muscular.
Pistol squats asistidas
La sentadilla a una pierna es un reto serio, pero también una de las mejores formas de trabajar el cuádriceps de forma aislada y funcional. Puedes usar un TRX, un marco de puerta o una silla para ayudarte. Con el tiempo, puedes progresar hasta hacerlas sin ayuda. El control y la fuerza que se desarrollan con este ejercicio son de otro nivel.
Leg extensions con banda elástica
Si te gusta el movimiento de la máquina pero no tienes acceso a ella o quieres variar, prueba a usar una banda elástica. Engánchala a una pata de la mesa o a un soporte bajo, y haz la extensión de pierna sentado. Es una buena opción para aislamiento, ideal si entrenas en casa.
Sprint en cuesta o escaleras
Correr en subida no sólo mejora la capacidad cardiovascular, también es una manera explosiva y eficaz de trabajar los cuádriceps. Cada zancada requiere potencia y control. Puedes hacer series cortas de sprint o subir escaleras de forma continua como parte de tu rutina.
Sentadillas frontales con barra o mancuerna
A diferencia de las sentadillas traseras, las sentadillas frontales colocan más énfasis en los cuádriceps. Exigen una postura más erguida y activa más el core. Puedes hacerlas con barra, con una mancuerna tipo goblet o incluso con kettlebells.
Jump squats (sentadillas con salto)
Este ejercicio pliométrico no solo activa los cuádriceps, también mejora la explosividad y el rendimiento deportivo. La clave está en controlar tanto la subida como la bajada, evitando el impacto. Úsalo como parte final del entrenamiento o en circuitos HIIT.
La máquina de extensión de piernas tiene su lugar, pero no es la única ni necesariamente la mejor forma de entrenar el cuádriceps. Estas 10 alternativas no sólo lo trabajan de forma eficaz, sino que además aportan versatilidad, funcionalidad y una buena dosis de diversión a tu rutina.
Al cambiar de estímulo, no solo mejoras el rendimiento físico, también evitas estancamientos, activas más grupos musculares y reduces el riesgo de lesiones. Así que la próxima vez que vayas al gimnasio (o montes tu sesión en casa), recuerda que hay vida más allá de la máquina de piernas. Tus piernas y tu motivación, te lo agradecerán.