El príncipe Guillermo se sincera sobre una fuerte crisis de salud mental

No estamos acostumbrados a que los miembros de las diferentes casas reales compartan con el público general cuestiones que les preocupan o aspectos de su vida privada. Es más, aunque de un tiempo a esta parte cada vez se muestran más cercanos y familiares, no suelen ofrecer detalles sobre su intimidad. Al menos hasta ahora.

Las nuevas generaciones de las diferentes familias reales cada vez dan más pasos para acercar la institución al resto de la población y así ganarse su apoyo, algo que resulta fundamental para su supervivencia. No en vano, para muchos, la Corona es un organismo que se percibe como arcaico, de un tiempo pasado y cuya cabida en la actualidad está cuanto menos cuestionada. Por eso, los royals más jóvenes apuestan por proyectos e iniciativas que conecten con las generaciones actuales y consigan su apoyo. Esto es, precisamente, lo que acaba de hacer el príncipe Guillermo.

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El nieto de la reina Isabel, consciente del papel que desempeñará algún día, apuesta por una monarquía renovada y transparente, que se involucre cada vez más en las cuestiones que preocupan a la mayor parte de la población. Temas como el cuidado del entorno, la protección del medio ambiente o la salud mental. Esta última, una realidad que, hace algunas décadas era casi un tabú -no hay que olvidar a las primas de la reina Isabel que murieron encerradas en un centro de salud mental y de cuya existencia apenas se hablaba-.

Por este motivo, el duque de Cambridge se ha sumado a un interesante proyecto. Guillermo ha participado en un podcast para Apple que lleva el título de ‘Time to walk’. Un proyecto que tiene por objetivo animar a las personas a que se tomen un tiempo para cuidar de su propia salud y busquen ratos para caminar, lo cual es muy positivo para la salud mental. Pero además, el hijo de Carlos de Inglaterra ha aprovechado para sincerarse sobre uno de los momentos que más le marcó en su vida.

A lo largo del episodio, Guillermo comenta lo mucho que le afectó un accidente del que fue testigo en el año 2017, mientras ejercía como piloto de ambulancias. En aquel momento acudió al lugar de una tragedia, en la que un niño había sido atropellado: “fue como si alguien hubiera puesto una llave en una cerradura y la hubiera abierto sin que yo diera permiso para hacerlo”, ha dicho en relación a un suceso que le conmocionó. “Me sumí en una nube oscura de angustia y depresión”, ha explicado. Una vivencia terrible que pudo superar gracias al apoyo de su familia y de sus compañeros.

El Príncipe comenta que, a lo largo de los años, la salud mental ha sido un tabú, pero es momento de que esto cambie e insiste en la necesidad de dedicar atención a esta cuestión a todos los niveles.