“Son los mejores medios del mundo”. Carlo Ancelotti sentenció en rueda de prensa cuando fue preguntado por el nivel que siguen mostrando a día de hoy Modric y Kroos en la rueda de prensa posterior al encuentro que enfrentó a Granada y Real Madrid en el estadio Nuevo Los Cármenes. Los blancos ganaron y brillaron al ritmo que impusieron tanto el croata como el alemán para comenzar con la mejor de las sensaciones un maratón de partidos que tendrán que recorrer los blancos hasta final de año.
El partido de Kroos fue simplemente perfecto. Hace unos días reconocía que ya está en el estado físico en el que mejor se encuentra y ante el Granada lo demostró con una actuación brillante. Antes del parón ya empezó a demostrar que su nivel estaba en claro ascenso, algo que ha confirmado en Los Cármenes. Cuando está bien domina el partido, marca el ritmo y sus compañeros juegan tal y como él quiere. Dos asistencias, una a Asensio en el primer gol y otra a Nacho en el segundo tanto, pusieron la guinda a su recital.
La situación de Modric es diferente. El croata sigue capitaneando a su país, con el que va a jugar hasta el Mundial de Qatar. De hecho, en el último parón sacó junto a sus compañeros el billete para la cita mundialista. Estas escapadas con Croacia le lastran en su físico, pero tiene tanto fútbol en sus piernas que a sus 36 años es capaz de sobreponerse a cualquier cansancio. Ante el Granada fue de menos a más. Le costó entrar en el partido, pero con el paso de los minutos se fue asentando hasta que se puso el frac para empezar a dirigir junto a Kroos el juego de los blancos.
Casemiro, otro genio
“A veces baja Modric, a veces Kroos, Casemiro sube, no me voy a meter ahí dónde tienen que moverse, el madridista puede estar tranquilo, no voy a meterme», explicó Ancelotti. Y es que, si el croata y el alemán dirigen, el brasileño es puro equilibrio. Es cierto que todavía no está a su mejor nivel, ya que cuando lo alcanza es el jugador más importante del equipo, pero aún así su fútbol es de notable. Ante el Granada comenzó la jugada que acabó con el gol de Vinicius y dio un gran pase a Mendy para que el francés hiciese el cuarto.
Los tres son historia del Real Madrid y del fútbol mundial. El único centro del campo capaz de conducir a su equipo a la conquista de Europa tres veces seguidas, pero la entidad madridista ya planea el futuro. Cuando se vayan apagando, Fede Valverde, Eduardo Camavinga y el canterano Antonio Blanco tienen que ser los jugadores llamados a recoger el testigo. El listón lo tendrán muy alto.
