El culebrón Mbappé sigue su curso. No tanto por la postura del Real Madrid y del jugador, que no cambia en el transcurso de las semanas, sino por la insistencia del PSG en buscar la fórmula para quedarse con el delantero francés más allá de la finalización de la presente temporada. La última idea dentro del club parisino sería la de intentar firmarle un nuevo contrato después del 1 de julio, cuando ya sería libre, para ahorrarse así tener que pagar 35 millones de euros al Mónaco.
En el momento de la firma de Mbappé por el PSG, en el año 2017, se estableció que en el caso de venta o renovación se deberían abonar 35 millones de euros. La intención de Leonardo y Al Khelaifi es en estos momentos regatear esa cláusula, ahorrarse ese dinero y poder invertirlo en la prima de fichaje de 100 millones que le han ofrecido en su última intentona por convencerle.
Esta última oferta del conjunto francés consiste en un salario de 50 millones de euros durante dos temporadas y un bonus por renovación de 100 kilos más. Sin duda, unas cantidades desorbitadas que invitan a pensar que Mbappé podría replantearse su decisión. Sin embargo, a día de hoy su convencimiento sigue siendo el de jugar en el Real Madrid y en el club tienen «cero dudas» de su fichaje.
El PSG también estaría intentando, según publica Le Parisien, medio cercano a las altas esferas del club francés, también renovar al hermano de Mbappé. Ethan, centrocampista que juega en la cantera del PSG, podría ser uno de los motivos para intentar convencer a Kylian.
Pese a todas las presiones que está sufriendo, Mbappé está demostrando que sabe manejarlo. Vengan de donde vengan los mensajes (su club, medios franceses, grada del Parque de los Príncipes…) ha sabido dejarlo a un lado para seguir trabajando de manera profesional haciendo lo que mejor sabe: marcar goles.
