Estamos en uno de los meses más oscuros del año y aún nos queda bastante para que los días se empiecen alargar. Diversas investigaciones señalan la conexión entre esa falta de luz solar con la predisposición a la tristeza y la depresión. Y es que, los rayos del sol son la principal fuente de vitamina D, vitamina que si se carece de ella se manifiesta con fatiga constante y cambios en el estado de ánimo. Hablamos con una dietista nutricionista para que nos cuente cómo nos afecta el déficit de esta vitamina y cómo podemos conseguir tener buenos niveles en esta época del año.
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La principal fuente de vitamina D es la exposición solar. Cuando la piel se expone a la luz solar ultravioleta B (UVB), produce vitamina D. Este proceso natural es fundamental para mantener niveles adecuados de esta vitamina en el organismo. Sin embargo, factores como la ubicación geográfica, la temporada, el uso de protector solar y la pigmentación de la piel pueden afectar la síntesis de vitamina D.
Laura Jorge es Dietista-Nutricionista, fundadora y directora del centro de nutrición y psicología que lleva su mismo nombre, y nos explica que hay ciertos síntomas que nos pueden indicar que tenemos niveles bajos de Vitamina D como «fatiga constante, cambios en nuestro estado de ánimo, problemas en la regulación del sueño, dolor articular u óseo, problemas de crecimiento en niños y mayor susceptibilidad a infecciones o enfermedades».
«Se sugiere exponer manos, brazos y cara al sol durante 10/30 minutos al menos dos veces por semana»
P: ¿Qué relación hay entre la vitamina D y el estado de ánimo?
R: La Vitamina D influye en la síntesis de neurotransmisores, como la serotonina (hormona de la felicidad) y niveles bajos de esta se asocian con depresión. También puede estar relacionada con la liberación de dopamina, otro neurotransmisor involucrado en la regulación del estado de ánimo y la sensación de recompensa.
También ayuda en la regulación del sueño y está comprobado que dormir mal puede afectar a nuestro estado de ánimo de manera negativa.
La Vitamina D funciona como antiinflamatorio en nuestro cuerpo y niveles bajos de esta se pueden relacionar con inflamación y esta a su vez, con peor estado de ánimo.
P: ¿Cuáles son las para obtener niveles correctos de Vitamina D?
R: Encontramos Vitamina D en alimentos como los huevos, el pescado azul y el hígado, pero la principal vía de obtención de esta vitamina es la exposición al sol. La cantidad de exposición solar necesaria puede variar según la ubicación geográfica, la época del año, la pigmentación de la piel y otros factores. Como referencia, se sugiere exponer manos, brazos y cara durante 10/30 minutos al menos dos veces por semana.
«Deberíamos ponernos crema solar si vamos a seguir expuestos al sol»
P: ¿Compensa el riesgo de exponerse al sol?
R: Si cumplimos con lo comentado anteriormente de exponernos unos 10-30 minutos al día no debería ser un problema. Tenemos que tener en cuenta que una vez pasado este tiempo recomendado para obtener Vitamina D, deberíamos ponernos crema solar si vamos a seguir expuestos al sol.
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P: ¿Cómo funciona la Vitamina D en el cerebro?
R: Tiene un papel importante en la protección neuronal, especialmente importante en enfermedades neurodegenerativas. Además, también ayuda a regular el crecimiento y diferenciación celular, súper importantes para que haya un equilibrio en el desarrollo de las células de nuestro cerebro.
Influye en la plasticidad sináptica, lo que es fundamental para el aprendizaje y la memoria.
Como hemos comentado antes, también es antiinflamatoria, lo cual nos protege de sufrir inflamación crónica en el cerebro, asociada a varias patologías. La Vitamina D regula los niveles de calcio intracelular, lo que es esencial para las funciones celulares normales en el cerebro.
Más allá del sol
Tomar el sol, una dieta equilibrada y los suplementos alimenticios pueden ayudar a tener buenos niveles. LessAging es un suplemento que protege las células frente al estrés oxidativo retrasando el envejecimiento y, además, es antiinflamatorio, fortalece el sistema inmunitario.
