Dormir es uno de los placeres del día, ese momento en el que podemos recargar las pilas después de una ajetreada jornada y descansar al margen del mundo. Aunque puede resultar una idea muy atractiva, no lo es para un porcentaje de la población, puesto que, según los expertos, más de un 10% de la población sufre de lo que se llama ansiedad, una patología que hace que muchos no puedan descansar o vivir de forma tranquila. La relajación que ofrece el descanso fuera de una vida alternativa, que no nos favorece, compite con una vuelta a la rutina que nos devuelve el insomnio como compañero de noches. Para paliar este incómodo momento, existen una serie recomendaciones que nos van a mejorar por dentro y van a favorecer un sueño más alargado y reparador, además de apoyarnos en el día a día en su control, veamos los principales consejos para dormir y evitar la ansiedad.
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Consumir fibra
Además de ser muy bueno para tu organismo y tu salud, consumir alimentos ricos en fibra también te ayuda a conciliar el sueño. Según algunos estudios recientes, cuanta más fibra consumas, más profundamente dormirás. Cambiar la dieta te ayudará a encontrar el equilibro, y consumir una dieta rica en grasas saturadas es perjudicial no sólo para la salud, sino que también para dormir, ya que ralentiza la producción de melatonina, la hormona responsable del sueño. Y muy importante: establece una rutina y horarios en tus comidas.
Practica un deporte
Si le preguntas a alguien que hace ejercicio, sabrás que normalmente no tiene problemas de sueño. Ahora bien, lo importante es el cuándo: si haces ejercicio antes de irte a la cama, no podrás dormir, porque tu cuerpo estará demasiado activo. Sin embargo, hacer deporte por la mañana o por la tarde (siempre unas tres horas antes de la hora de dormir), ayudará. Deportes como el yoga, meditación o estiramientos para mejorar la postura han probado ser muy beneficiosos.
Elimina cafeína y alcohol
No hace falta ser demasiado inteligente para saber que consumir cafeína antes de irnos a dormir es totalmente contraproducente. Como excitante, provocará que no nos podamos dormir. Intentar evitar la cafeína (por completo, si sientes algún tipo de trastorno de ansiedad), ayudará a que puedas relajarte y dormir. En cuanto al alcohol, muchos dicen que les relaja tomar un poco antes de ir a la cama, pero quizá no sabíais que tiene un componente depresivo que no ayuda para nada.
Hazte con un buen libro
Dicen que lo mejor que puedes hacer es leer un poco antes de irte a la cama, y es verdad. Es uno de los grandes consejos para poder dormir y esto tiene una razón y es que leer puede hacer que tu mente desconecte y descanse de aquello que te preocupa en tu día a día.
Evita la tecnología
Los expertos lo han dicho en una gran cantidad de ocasiones, la tecnología nos impide conciliar el sueño. Nos pasamos más horas sin dormir de las que deberíamos por culpa de estar pendientes de las pantallas y la luz del móvil, de las redes sociales, y diversos aparatos electrónicos. Dejar el móvil a un lado una o dos horas antes de irse a la cama te ayudará a conciliar el sueño.
Establece una rutina
Dicen que vivir siempre sin salirse de la rutina puede ser perjudicial, pero si sufres de insomnio, lo mejor es crearte un hábito para ir a la cama. Utiliza una hora para marcharte a la cama, escoge otra hora para levantarte todos los días, incluyendo el fin de semana. Sólo así podrás cambiar tus hábitos de sueño y dejar las preocupaciones a un lado. Lo importante no es crear hábitos de sueño, sino acostumbrar a tu cuerpo a los momentos anteriores a irse a la cama. La rutina tiene que comenzar al menos dos horas antes de ir a dormir. Elige el momento para ducharte, lavarte los dientes, apagar el móvil, escribir un poco, leer un libro. Uno de los consejos para dormir más efectivos. Tu cuerpo se relajará.
Presta atención a tu temperatura
Nuestros cuerpos están más cómodos para conciliar el sueño cuando se encuentran más bien a baja temperatura, siendo la ideal del ambiente entre 18 y 22 grados. Eso sí, no para todos es igual, puesto que la clave está en encontrar tu temperatura ideal. Un truco es darte un baño o ducha caliente, para imitar cómo esa temperatura desciende para dormir.
No pienses en los tiempos
Uno de los principales consejos para poder dormir. No pienses en ello puesto que, sólo te pondrás más nervioso y te entrará más ansiedad. Si no puedes dejar de mirar el reloj, sácalo de la habitación. Otro truco es salir de la cama y dar una vuelta por la habitación, respirando profundamente durante unos minutos. Intenta volver a la cama después. ¿Aun así no duermes? Hay gente que sufre insomnio, y asegura que una de las técnicas que ayudan a conciliar el sueño es precisamente imaginar que uno se duerme, coordinando dichos pensamientos con una respiración pausada, una temperatura acorde y, quizá, acompañarlo con un poco de música.