Los primeros invernaderos modernos, cubiertos con vidrio, se construyeron en Italia en el s.XIII para cultivar las plantas exóticas que los exploradores traían de tierras lejanas. Hoy en día se conservan algunos de los invernaderos más hermosos que se fabricaron hace dos siglos, como Palmenhauss en Schönbrunn Palace Park (Viena) y otros más recientes, como el de Woolbeding (Inglaterra), son construcciones de diseño. Sea de la época que sea, todos tienen en común el encanto del haz de luz atravesando el cristal, iluminando centenares de plantas y flores. No solo Europa tiene los más bonitos del mundo, también en Canadá y Nueva York se pueden contemplar auténticas obras de arte.
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Palmenhaus, Viena
Este invernadero fue diseñado por Franz von Segenschmid y construida por el metalúrgico Ignaz Gridl en la década de 1880. Se encuentra en el parque del palacio Schönbrunn, Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.
Es perfecto para visitar en familia, pues los espléndidos jardines barrocos son ideales para perderse y divertirse. Quienes lo hemos visitado, coincidimos en que es un «refugio de naturaleza tropical, sobre todo en diciembre».
Palmenhauss está compuesta por 45.000 hojas de cristal y alberga 4.500 especies de plantas.
El invernadero de Woolbeding
Se encuentra en Sussex Occidental (Inglaterra), en los jardines históricos de la Woolbeding Gardens. Fue inaugurado este año y su estructura recuerda a la de una flor: cuenta con 10 estructuras en forma de pétalo que se abren y cierran dependiendo del clima.
Imprescindible su visita no solo por contemplar el invernadero, sino también por hacer la ‘Ruta de la Seda’, pues es aquí es donde se exportaban desde Asia la seda y también especies de plantas exóticas.
Tropicarium, Frankfurt
Se encuentra en Plamengarten, uno de los jardines más grandes de Alemania, con 22 hectáreas.
Aquí se puede contemplar una rica colección de plantas tropicales que incluyen orquídeas, helechos, palmeras… Antes de venir consulta la programación, porque dentro se suelen organizar conciertos y exposiciones.
Invernaderos reales de Laken, Bruselas
Obra del arquitecto Alphnose Balat, son un pequeño gran paraíso tropical a las afueras de Bruselas. Fueron construidos en la segunda mitad del s.XIX por mandato del rey belga Leopoldo II en 1873.
Si estás estos días en Bruselas, los encontrarás cerrados. Solo se abren tres semanas al año, del 15 de abril al 8 de mayo, coincidiendo con el período de máxima floración.
Palacio de Cristal de Arganzuela, Madrid
En Madrid, tenemos varios históricos invernaderos, como los del Real Jardín Botánico o el que se encuentra en el Palacio de Cristal de Arganzuela, que en la actualidad aloja 9.000 especies.
Conservatorio Muttart, Canadá
El invernadero fue diseñado por el arquitecto Peter Hemingway y se compone de cuatro pirámides de vidrio, cada una aguarda plantas típicas de una zona del mundo como Asia y Australia.
Se encuentra en el valle del río North Saskatchewan, frente al centro de la ciudad en Edmonton, Alberta, conocida por su belleza natural.
Jardín Botánico de Nueva York
Visitar Nueva York estos meses tiene mucho encanto. Desde patinar sobre hielo, tomar un chocolate caliente en las alturas del Central Park Tower, visitar el Museo Met… y también el invernadero del Jardín Botánico.
El Conservatorio Enid A. Haupt del Jardín Botánico es de estilo victoriano, construido en 1902 por el arquitecto William R. Cobb. En 1975 fue declarado Monumento Histórico.