Hablamos mucho sobre Portugal... Pero es que Portugal es, sin ninguna duda, uno de los países más de moda. No dejan de abrir nuevos hoteles, no dejamos de descubrir nuevos lugares y no cesan las ganas de viajar a nuestro país vecino. Hoy toca hablar de un fantástico hotel con galería de arte ubicado en el Alentejo.

Nos ubicamos en Herdade des Freiras, construido en 1830, una fábrica -podríamos decir- que se convirtió en uno de los mayores productores de aceite. Y en este lugar nace Da Licença, un espectacular hotel con más de 120 hectáreas de colinas repletas de olivos.

De donde surgía el aceite, por supuesto. Una zona fantástica en la Serra d’Ossa, cercana a los icónicos pueblos de Alentejo de Estremoz y Evoramonte. Podemos realizar excursiones cercanas a estos fantásticos pueblos.

Pero en Da Licença podemos hacer muchas cosas, si queremos quedarnos en este hotel. Y era el objetivo de Vitor Borges y Franck Laigneau cuando construyeron este lugar.

Un objetivo que nació cuando en 2000 se enamoraron de la zona. Sintieron ese sentimiento familiar, ese deja vu que a veces tenemos con en algunas zonas o lugares. A pesar de no haberlos visitado nunca.

En primer lugar podemos disfrutar de su galería de arte, el alma del hotel y lo que hace de este alojamiento un lugar tan especial. Esta se encuentra ubicada en la zona del molino, construido en 1904. Y surge con la idea de continuar el trabajo de Franck Laigneu, que abrió en 1998 una preciosa galería en París, cerca del icónico Museo de Orsay. Y lo hizo para enaltecer el diseño nórdico, de Noruega y Finlandia.

Y con esta filosofía surge la galería de arte de Da Licença. Encontramos piezas de Jugendstil, Design Dornach… Esto no es un museo, es una galería donde se puede disfrutar, de verdad, de todas las piezas.

Y también podemos disfrutar de sus espectaculares suites, porque no hay que olvidar que Da Licença es un hotel. Hay cinco sofisticadas suites con baños de mármol y detalles tallados por artistas locales. Porque no hay que olvidarse de que estamos en el Alentejo, en Portugal. En cada una de las habitaciones podemos deleitarnos de algunas obras de arte de su colección privada… Pero también de las zonas verdes que encontramos a los alrededores, disponibles si nos asomamos a las terrazas o a sus patios. Sin Da Licença es uno de esos sitios minimalista, pero rebosante de belleza. Uno de esos alojamientos especiales en los que dormir… es un arte.
