Nuestra travesía a bordo del crucero más grande y lujoso del mundo, dio para mucho y no podíamos dejar de destacar los exclusivos destinos que tuvimos la suerte de conocer y disfrutar. Uno de estos lugares paradisíacos y privados es la isla de Coco Cay, en las Bahamas. Un cayo en el mar Caribe, propiedad de la naviera Royal Caribbean. Una pequeña isla soñada de inmaculadas y finas arenas y agua turquesa que tiene todas las comodidades para pasar allí, una estadía inolvidable. Un Perfect Day At Coco Cay, como ellos mismos lo llaman. Un día perfecto al sol, con lujosas y tranquilas zonas apartadas para poder dorarnos la piel y relajarnos, gastronomía de primera para disfrutar y un sinfín de actividades emocionantes. Quédate, y siente con nosotros la cálida brisa marina del Caribe en la exclusiva Coco Cay…
Sus playas con encanto…
Se dice, que lo primero que vio del ‘nuevo mundo’ Cristobal Colón y su tripulación -repartida entre La Niña, La Pinta y La Santa María- fue, la playa de una isla de las Bahamas. Concretamente, el 12 de octubre de 1492, los descubridores llegaron a Guanahaní, una isla de Bahamas a la que llamaron, San Salvador. Seguramente, al pisar sus blanca arena fina y admirar su paisaje, pensaron, que estaban en el paraíso…porque, lo cierto es que si algo son las más de 700 islas que componen este país caribeño, eso es, paradisíacas.
La costa de Coco Cay es idílica y las opciones para disfrutarla, son muchas. Nosotros, llegamos a este pequeño cayo privado a bordo del ‘Wonder of the Seas’ y, fue amor a primera vista. También llamada, Cayo Norman o Cayo Little Stirrup , Coco Cay es una de las Islas Berry, un conjunto de cayos y pequeñas islas que se encuentran aproximadamente a 55 kilómetros al norte de Nassau, la capital de Bahamas. La isla posee alrededor de un kilómetro de ancho de este a oeste y tiene menos 183 metros de norte a sur. Sus preciosas playas se encuentran al frente de una cuenca coral donde los manatíes, las rayas, y numerosos peces se pueden observar.
Cabañas flotantes exclusivas
La experiencia en esta isla exclusiva para clientes de los crucero de Royal Caribbean puede llegar a ser apasionante. Vivir la estadía en una cabaña privada en la playa, donde se puede disfrutar de hermosas vistas al Caribe mientras un asistente se ocupa de todas tus necesidades, supone todo un deleite.
Estas cabañas cuentan con vistas inmejorables al horizonte, hamacas sobre el agua, duchas de agua dulce y toboganes privados. Todo esto, sumado a la experiencia en sí que supone estar en un lugar tan especial como Coco Cay. En ellas, ver el atardecer, se vuelve algo más mágico aún.
Foto: Royal Caribbean/ Tim Aylen
‘Coco Beach Club’
A lo largo y ancho de Coco Cay, existen zonas en las que no todo el mundo puede acceder. Solo los pasajeros de primera clase pueden disfrutar de zonas como el ‘Coco Beach Club’. Un lugar con acceso restringido que es, un auténtico lujo. Un beach club perfecto rodeado de mar, donde descansar en las cabañas flotantes de las Bahamas. También allí, pudimos degustar exclusivos y refrescarnos en un lugar de ensueño: una piscina infinita con vistas inmejorables.
‘Perfect Day at Coco Cay’ de Royal Caribbean
«El concepto de vacaciones es distinto para todos, especialmente en ‘Perfect Day at Coco Cay’. Para algunos, la escapada de playa perfecta no está completa sin actividades que les llenen de adrenalina, mientras que otros prefieren relajarse en una tranquila ubicación con vistas al mar. Por eso, te invitamos a vivir una aventura irrepetible en la que disfrutarás hagas lo que hagas porque será a tu manera… cuando abordes los mejores cruceros a CocoCay», aseguran desde la empresa de cruceros.
Esta pequeña isla que encandila con su belleza fue, uno de los destinos que visitamos a bordo del ‘Wonder of the Seas’. Un destino exclusivo y privado al que solo se puede acceder si uno se embarca en alguno de los cruceros que componen la numerosa flota de Royal Caribbean. Una experiencia para disfrutarla de distintas maneras y desde diferentes perspectivas pero que deja en la mente y el corazón de quien la visita, un recuerdo imborrable.
