Las mujeres siempre hemos inspirado. Siempre hemos sido las musas de los artistas. Nuestros nombres han sido elegidos para nombrar vestidos, galerías, ciudades… Y también restaurantes. Es el caso de uno de los últimos locales en abrir en Barcelona. Acaba de llegar a la ciudad Jacqueline, Jacqueline Picasso.
Jacqueline Picasso, o Jacqueline Roque, fue mujer del pintor Pablo Picasso. Fue su musa y su segunda esposa, siendo protagonista de más de 400 obras del artista malagueño. Dicen que fue el verdadero amor del artista malagueño. Ella tenía 27 años cuando se conocieron, él rozaba los 50. Y se conocieron en el taller Madoura de Vallauris. Y ha sido la mujer que ha inspirado en este restaurante, no solo en el nombre, también en el interiorismo. «En el local se mezclan detalles del art nouveau, formas espontáneas, gráficas y surrealistas con elementos clave de la obra de Picasso», nos explican.
El Exaimple podríamos decir que es el corazón de la Ciudad Condal. Es la zona en la que no dejan de abrir restaurantes y proyectos gastronómicos. Y aquí es donde ha abierto Jacqueline, el proyecto del joven empresario barcelonés Toni Cano y el grupo Rockwell. Toni Cano es hijo de Antonio Cano, director del grupo Sutton, así que conoce bien la ciudad y todo lo que funciona. Por otra parte, Rockwell es un prestigioso grupo de diseño y arquitectura que trabaja bien a nivel internacional. Tienen sede en Nueva York. Son un tándem interesante.
«Jacqueline es una triple propuesta de gastronomía, música en vivo, coctelería y un gran interiorismo», nos explican. Y todo esto en un gran espacio en la calle Enrique Granados que se reparte en diferentes espacios. Un champagne bar con propuestas de alta coctelería y un dinner club. Del champagne bar hay que destacar que toda la coctelería tiene el sello de Sergio Pardo, que ha sido finalista en importantes concursos de cócteles. El dinner club, por otro lado, es un concepto de restaurante para más de 100 personas. Pero si nos apetece algo más especial, hay una barra de omakase disponible solo para 8 personas. Es probablemente uno de los rincones más singulares de este nuevo restaurante en Barcelona. Y el baño… Pero no te decimos más. Hay que reservar en Jacqueline para saberlo.