«La originalidad consiste en el retorno al origen», solía decir Antoni Gaudí. Arte aplicado a la arquitectura, formas sinuosas y un estilo propio alejado de las tendencias de su época. Mientras que la acromía y las líneas rectas se imponían como señas del Modernismo, él creó un estilo propio basado en la observación de la naturaleza, el uso de los colores y las formas curvas. ‘Gaudism’ es un proyecto que nos acerca al mundo de Gaudí mientras explora nuevos conceptos mediante el uso de la Inteligencia Artificial. Nos adentramos en la mente del arquitecto catalán a través de este proyecto.
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En la mente de un genio
‘Gaudism’ es un proyecto generado con Inteligencia Artificial que nace con el objetivo de acercarnos a la mente del genio arquitecto, padre de La Sagrada Familia, la Casa Milà, conocida com La Pedrera, y tantas otras obras que son Patrimonio de la Humanidad.
«El arquitecto es un hombre sintético, que es capaz de ver las cosas en conjunto antes de que estén hechas», dijo en una ocasión Antoni Gaudí para explicar cómo entendía su oficio.
Con una gran intuición y creatividad, Guadí concebía sus edificios de una manera global prestando atención tanto a las soluciones estructurales, como las funcionales y decorativas.
El proyecto ‘Gaudism’, refleja a la perfección este concepto global de la arquitectura, pero sobre todo su manera de concebirla centrándose en la naturaleza. «El arquitecto del futuro se basará en la imitación de la naturaleza… Es la forma más racional, duradera y económica de todos los métodos». Solo hay que echar un vistazo a la arquitectura del s.XXI y su obsesión por los jardines verticales para darse cuenta de que Gaudí fue un visionario.
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Entre finales del s. XIX y principios del XX, Gaudí apostó por el Modernismo, introduciendo nuevas técnicas en el tratamiento de los materiales, como el ‘trencadis’, una aplicación ornamental del mosaico a partir de fragmentos de cerámica unidos con argamasa.
La concepción del templo como un bosque
‘Gaudism’ vive sobre todo de la influencia del Park Güell, donde la naturaleza y arquitectura se mezclan entre sí, o en La Sagrada Familia. Formas orgánicas, líneas curvas y ondulantes. La concepción del templo como un bosque de árboles (columnas), con ramas (ramificaciones), y follaje (bóvedas).
Edificios inclinados para que no se caigan
«Me preguntaron por qué hacía columnas inclinadas, a lo que contesté: Por la misma razón que el caminante cansado, al parar, se apuntala con el bastón inclinado, ya que si lo pusiera vertical no descansaría». Una de las máximas de Gaudí era la función mecánica o estructural; es decir, que se aguante y no se caiga.
