Contenido
- 1 ¿Qué es la presión arterial?
- 2 ¿Cómo se produce la tensión arterial?
- 3 ¿Qué problemas de tensión arterial pueden presentarse?
- 4 ¿Cómo se toma la presión arterial?
- 5 ¿Cuáles son los valores normales de la presión arterial?
- 6 ¿Qué puede ocasionar la hipertensión arterial?
- 7 Recomendaciones para controlar la tensión arterial
- 8 Bibliografía
Las enfermedades cardíacas son causantes de millones de muertes anuales a nivel mundial. La hipertensión arterial está asociada con muchas patologías peligrosas que pueden ser potencialmente mortales.
En vista de lo anterior, es muy apropiado interesarse en cómo tener una tensión arterial en niveles apropiados.
A veces escuchamos que una persona tiene la presión arterial baja o alta, pero no entendemos en profundidad lo que esto significa. Aun si no somos especialistas en medicina, es conveniente que comprendamos en qué consiste la tensión arterial, cómo se mide y cómo podemos cuidarla.
¿Qué es la presión arterial?
La tensión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias mientras el corazón bombea sangre a través del cuerpo.
Es esencial para transportar oxígeno y nutrientes a los órganos y tejidos, y para eliminar los productos de desecho. Por eso, es uno de los signos vitales del ser humano.
¿Cómo se produce la tensión arterial?
La tensión arterial se produce por la acción combinada del corazón y los vasos sanguíneos, lo cual se da de las siguientes maneras:
- Presión sistólica. La sístole es cuando el corazón se contrae, expulsa sangre a las arterias, creando la presión máxima.
- Presión diastólica. La diástole es cuando el corazón se relaja, se llena de sangre, y la presión en las arterias disminuye a su valor mínimo.
¿Qué problemas de tensión arterial pueden presentarse?
Básicamente, hay dos problemas principales relacionados con la tensión arterial, los cuales son:
- Hipotensión. Está relacionado con la presión arterial baja, lo cual puede causar mareos, debilidad y desmayos.
- Hipertensión. Relativa a la presión arterial alta, lo que puede aumentar el riesgo de padecer enfermedades cardíacas, derrames cerebrales y otras complicaciones de salud.
Algunas estadísticas de la Organización Mundial de la Salud señalan que uno de cada cinco adultos sufren de problemas de presión arterial elevada.
¿Cómo se toma la presión arterial?
Con el propósito de medir la presión arterial se dan los siguientes pasos:
- Preparación previa. Para obtener valores más cercanos a lo real, es mejor que la persona no haya realizado actividades físicas al menos una hora antes de la toma de tensión. Es preferible haber vaciado la vejiga y evitar el consumo de medicamentos, tabaco y café antes de la medición.
- Relajación. Al menos cinco minutos antes de la medición, el paciente debe recostarse en una silla cómoda.
- Medición de la tensión. Se usa un tensiómetro, que consiste en un manguito de caucho blando hinchable conectado a una pera. Se coloca en el brazo por encima del codo, de forma que quede a la altura del corazón. Se hace la medición y se esperan pocos minutos para repetirla.
¿Cuáles son los valores normales de la presión arterial?
La presión arterial puede variar según la hora del día y las labores que se realicen. Por lo general, es mayor en el día mientras se trabaja, baja en los períodos de reposo y aún más mientras se duerme.
Las emociones también pueden incidir en la tensión arterial. En el caso de las mujeres, puede haber alteraciones en la etapa de la menopausia.
Se aceptan como valores normales de la presión arterial los siguientes: presión sistólica y diastólica iguales o menores a 120 / 80 mmHg respectivamente.
Los valores de 130-139 / 80-89 mmHg son considerados hipertensión estadio I. Y mayores o igual a 140 / 90 mmHg, se tratan como hipertensión estadio II.
En la medición de la tensión arterial al primer valor se llama valor sistólico y al segundo se le denomina valor diastólico.
¿Qué puede ocasionar la hipertensión arterial?
La hipertensión, o presión arterial alta, es una condición en la que la presión arterial es consistentemente más alta de lo normal. Se define como una presión arterial sistólica de 140 mmHg o más, o una presión arterial diastólica de 90 mmHg o más.
Con el paso de los años, los vasos sanguíneos se tornan más rígidos, ocasionando que la presión arterial se eleve, lo que puede dar origen a enfermedades cardiovasculares y renales.
Factores externos como el estrés, la ira descontrolada, malos hábitos de alimentación, la ingesta excesiva de alcohol, el consumo de tabaco y el sedentarismo, están estrechamente ligados a la aparición de la hipertensión arterial.
Recomendaciones para controlar la tensión arterial
A fin de tener una tensión arterial sana, es preciso hacer ajustes en algunos hábitos alimenticios y de vida, tales como:
- Dieta saludable. En la alimentación hay que privilegiar el consumo de frutas, verduras, granos integrales y proteínas magras, así como tener una dieta baja en grasas saturadas, grasas trans y sodio.
- Controlar el estrés. El estrés excesivo puede elevar la presión arterial temporalmente, por lo tanto, hay que evitar situaciones riesgosas y llevar una vida pacífica.
- Practicar ejercicio de forma regular. Realizar al menos 30 minutos de actividad física moderada la mayoría de los días de la semana hace mucho bien para la presión arterial.
- Evitar hábitos nocivos. Comer de forma moderada, evitar el tabaco y limitar el consumo de alcohol son excelentes medidas que permiten mantener una buena salud.
La actividad física, la buena alimentación y llevar una vida equilibrada son ingredientes esenciales que permiten que podamos tener una presión arterial sana.
Bibliografía
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