Contenido
- 0.1 Llega a España el ‘dry begging’: la nueva tendencia que está rompiendo muchas parejas, según los psicólogos
- 0.2 Esto es lo primero que debes enseñar a tu hijo antes de que cumpla 3 años, según una profesora de guardería
- 0.3 Ni bailes ni teatro: la mejor actividad social para mayores de 70 años que quieran sentirse jóvenes y activos
- 1 La falta de normas clara provoca que los niños no obedezcan a sus padres, según la psicología
- 2 La sobreprotección impide a los niños valerse por sí mismos
- 3 Educar a gritos: los psicólogos lo señalan como la peor técnica para educar a los hijos
- 4 Consejo de la psicología: jamás ignorar los sentimientos de los niños
Criar a un hijo es la tarea más estimulante para una persona, pero también supone todo un reto. A veces, cometer ciertos errores en la educación de los niños provoca desobediencia y otros problemas a largo plazo. Estos son los cuatro fallos educativos que los padres deben evitar, según la psicología.
La sobreprotección, la falta de normas claras, los gritos y la desatención emocional de los niños son los principales lastres en el desarrollo educativo y afectivo de nuestros hijos.
Desgranamos con mayor detalle cada uno de estos problemas que debes evitar para que tus hijos te hagan más caso.
La falta de normas clara provoca que los niños no obedezcan a sus padres, según la psicología
Una cosa es dejar espacio a nuestros hijos y no querer ser padres excesivamente duros. No obstante, la falta de normas claras en casa no dota de libertad a los niños, sino todo lo contrario.
Cuando hay una falta de límites coherentes en el comportamiento, el niño no sabe qué se espera de él. Esto genera una sensación de caos que desemboca en el aumento de su inseguridad.
Establecer unas normas firmes y explicarlas con claridad para que los hijos las comprendan fomenta una actitud más comprensiva respecto a la autoridad de los padres.
La sobreprotección impide a los niños valerse por sí mismos
Para muchos padres primerizos, la sobreprotección es una reacción natural. Sin embargo, debemos controlar este error en la educación para impedir que los niños sean excesivamente dependientes.
Querer anticiparse a todas las necesidades de un niño y resolver todos y cada uno de sus problemas acaba siendo contraproducente: de esta forma al niño le cuesta más desarrollar habilidades fundamentales como la autonomía o la toma de decisiones.
Educar a gritos: los psicólogos lo señalan como la peor técnica para educar a los hijos
Si antes decíamos que hace falta educar a los niños con disciplina, gritar y amenazar es la peor técnica para conseguirlo.
Cuando un padre grita a su hijo, el niño no escucha el mensaje, sino que sólo percibe el tono. Este tipo de actitud genera miedo y contribuye a aumentar la distancia emocional entre padres e hijos.
Si se comienza a asociar la comunicación paternofilial con el conflicto, el impulso natural de los niños es la rebeldía.
Educar con firmeza pero con claridad y calma es la mejor forma de que el mensaje cale y que el niño se muestre más receptivo y dispuesto a colaborar.
Consejo de la psicología: jamás ignorar los sentimientos de los niños
La desatención emocional de los niños es otro de los errores que contribuyen a aumentar la distancia comunicativa entre padres e hijos.
Si los padres no hacen un esfuerzo por comprender las frustraciones o las peculiaridades de sus hijos, los niños se sienten incomprendidos y solos.
Los niños necesitan aprender a identificar lo que sienten para aprender a gestionar sus emociones. Cuando los adultos los escuchan con empatía y les enseñan a actuar frente a sus impulsos, los niños fortalecen su escudo emocional y se sienten más conectados a la autoridad de sus padres.