Las relaciones sociales son un aspecto sumamente importante en la vida de todas las personas. A partir de ellas intentamos generar vínculos que nos permitan conocer, compartir, crecer y desarrollarnos en la interacción e intercambio de ideas, miradas, opiniones, pensamientos, deseos, proyectos y sueños. Ya sea con amigos, familiares, compañeros de trabajo o una pareja, el diálogo y la comunicación es un asunto central para desplegar todas nuestras habilidades, saberes, conocimientos y herramientas. Sin embargo, en ocasiones, en los vínculos de pareja suelen presentarse dificultades, obstáculos y desacuerdos que, si no se trabajan con sensatez y reflexión, pueden conducir a momentos difíciles y complejos. Y en las relaciones de pareja pasa algo parecido, si te pasa, te has preguntado, ¿por qué tu pareja no te da la mano en público?
El contacto físico entre las parejas es una de las formas principales de afecto, cariño, comunicación, expresión y valoración. Es un modo de reconocer, validar y recibir a la otra persona para compartir un momento que genere disfrute, placer, alegría, diversión y conexión. Sin embargo, puede presentarse una distinción entre los gestos y manifestaciones que se realizan en privado y en el espacio público. Muchas personas experimentan situaciones que perciben como desprecio y surge la pregunta de por qué la pareja no le da la mano en público. La psicóloga Amparo Calandín expone en su web una cuestión que resulta clave para reflexionar: «Si la empatía es ponerse en el lugar de los demás, el desprecio se convierte justo en todo lo contrario. Los actos de desprecio hacía tu pareja, en mayor o menor medida, infringen un daño sobre la persona que van dirigidos, y se manifiestan en actitudes agresivas y de falta de respeto con la pareja».
¿Por qué tu pareja no te da la mano en público?
En algunas circunstancias, la razón y el significado de por qué tu pareja no te da la mano en público puede atribuirse a un momento efímero, espontáneo y propio de una situación de cansancio o agotamiento.
Pero, a su vez, también se presenta el factor del menosprecio que puede resultar muy nocivo y angustiante para el ánimo y las emociones de la persona víctima de estos tratos.
La psicóloga Amparo Calandín afirma que el menosprecio es sinónimo de «yo tengo más valor que tu” y “yo soy mejor, y tú estás por debajo de mi». «Es una actitud que se alimenta de pensamientos negativos a largo plazo sobre la otra persona, y surge en la forma de un ataque dirigido a la propia consciencia del otro».
A raíz de estas actitudes y manifestaciones en el vínculo de pareja, Calandín expone que quienes desprecian a su pareja suelen tener un perfil rígido, emocionalmente inmaduro, y que también necesitan ser aceptados por los demás.
En este sentido, añade que son personas que suelen presentar una baja tolerancia a la frustración, con problemas para gestionar sus emociones, y se dejan llevar fácilmente a estallidos de ira.
«Son personas que no suelen tolerar el desacuerdo y que no conectan ni ven las necesidades de los otros. Además, es característico que no sean muy hábiles comunicando», aclara.
¿Cómo se manifiesta el desprecio en la pareja?
Según lo que desarrolla la psicóloga, pueden identificarse una serie de señales comunes que te pueden ayudar a identificar si existe este desprecio por parte de tu pareja a partir de preguntarte por qué no te da la mano en público.
Es frecuente que las primeras interpretaciones que te surjan es que se trata de una persona insegura o que en esa actitud traslada un hábito y costumbre de cómo fue su crianza familiar.
Un ejemplo es la falta de respeto como no respetar tus decisiones, hacer comentarios acerca de tu aspecto físico, forma de hablar y de ser intentando ridiculizarte. A su vez, manifestar juicios de valor y críticas permanentes sobre las cuestiones mencionadas anteriormente.
La falta de empatía como restarle importancia a tus sentimientos o un trato considerándote inferior a él o ella también son muestras y señales de desprecio por parte de tu pareja.
Es clave intentar dimensionar y tomar consciencia del desprecio continuado, ya que genera un gran impacto en nuestra salud mental, provocando un daño psicológico, haciendo que tengamos una visión de nosotros mismos más debilitada y negativa.
El doctor Juan Romeu, integrante del gabinete psiquiátrico y psicológico, reflexiona acerca del maltrato psicológico del que son víctimas muchas personas por parte de sus parejas.
Entre las actitudes más frecuentes que muestran las víctimas, el profesional menciona que la persona cuestiona su propia forma de ser, sus actitudes y comportamientos. Además, excusa y exculpa a su maltratador, a la vez que se culpa a sí misma, duda de ella misma y de sus acciones y presenta sentimiento de inferioridad y dependencia emocional.
En síntesis, si dudas de por qué tu pareja no te da la mano en público, una de las claves es intentar dialogar y consultarte por esa actitud. La comunicación es transformadora ante situaciones de incertidumbre, incomodidades o desacuerdos.