Si sufres oniomanía y estás comprando todo el rato es por esto, según la psicología

Identificar este problema a tiempo es clave para evitar que se convierta en un patrón destructivo en el consumidor

Oniomanía

Mujer comprando compulsivamente

Comprar objetos de forma compulsiva, incluso sin necesitarlos, se convirtió desde luego en una práctica más habitual de lo que parece. El auge de las compras en línea, las rebajas, la presión social por la imagen y la inmediatez que ofrece el entorno digital contribuyen a que se desdibuje el límite entre el deseo y la necesidad. Es aquí donde aparece el fino límite entre la naturalización de estas conductas como parte de una sociedad consumista y el padecimiento de la oniomanía, considerado como un trastorno para el campo de la psicología.

Pero, ¿Qué hay detrás de este impulso descontrolado por gastar? La psicología ofrece respuestas concretas que permiten comprender el origen de esta conducta.

¿Qué es la oniomanía y por qué algunas personas lo padecen?

La oniomanía es un trastorno psicológico caracterizado por una necesidad compulsiva de realizar compras. A diferencia del consumo habitual, quien padece esta condición compra de forma repetitiva y sin control, motivado por una urgencia que escapa a la lógica o la necesidad real.

No se trata de un simple gusto por adquirir productos. La persona con oniomanía experimenta un impulso incontrolable que le lleva a consumir como forma de lidiar con malestares emocionales, aunque esto desemboque en consecuencias negativas: económicas, personales y psicológicas.

Este trastorno no está oficialmente clasificado en los manuales clínicos como una categoría independiente. En cambio, suele enmarcarse dentro del conjunto de los trastornos del control de los impulsos no especificados.

¿Por qué aparece la oniomanía y qué impulsa a estas personas a comprar a cada rato?

La compra compulsiva no ocurre de forma espontánea. Su aparición responde a factores específicos que inciden en la salud emocional y en los hábitos de comportamiento. Entre las principales causas se encuentran:

Según diversos estudios, como el de la psiquiatra alemana Emil Kraepelin y conferencias como la Global Conference on Business and Finance Proceedings (2015), entre el 80% y el 92% de los casos de oniomanía se presentan en mujeres, principalmente entre los 18 y 30 años.

La diferencia de género se expresa también en los objetos adquiridos: mientras ellas optan más por ropa, calzado y complementos, los hombres compulsivos suelen centrarse en productos electrónicos o tecnológicos.

¿Cuáles son las fases de la compra compulsiva?

El comportamiento del comprador compulsivo sigue una secuencia bien definida:

Esta secuencia puede repetirse con una frecuencia elevada, generando un ciclo difícil de romper.

¿Cuáles son las consecuencias emocionales, económicas y sociales de la oniomanía?

El impacto de la oniomanía se manifiesta en varios niveles:

En algunos casos, la persona puede evitar utilizar los objetos adquiridos, acumulándolos o incluso olvidando su existencia.

¿Qué tratamientos hay disponibles para abordar la oniomanía?

Aunque no es una categoría clínica reconocida como trastorno independiente, existen tratamientos efectivos para quienes sufren oniomanía, según expresan medios especializados como IPSIA (Psicologos Madrid). El abordaje más habitual combina terapias psicológicas y, en ciertos casos, tratamiento farmacológico.

Cómo prevenir o detectar señales tempranas

Aunque la oniomanía puede desarrollarse de manera gradual, hay signos que permiten detectar su aparición:

Algunas recomendaciones para evitar caer en este patrón incluyen:

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