Contenido
Hay hábitos que pueden ayudarnos a estimular el cerebro, pero hay gente que juega con ventaja: aquellos que disponen de una memoria fotográfica. Algunos lo ven como un mito, pero otros creen que hay aspectos que pueden entrenarse.
En concreto, hay tres hábitos que suelen entrenar las personas con una memoria fotográfica más desarrollada y que tú puedes mejorar. La clave está en poner el foco en la visualización, para recordar imágenes, datos y situaciones con precisión.
El hábito clave para mejorar la memoria fotográfica
Uno de los hábitos más comunes entre personas con gran capacidad memorística es el uso del Método de Loci, también conocido como palacio de la memoria.
Esta técnica se remonta al Imperio Romano y fue documentada por Marco Tulio Cicerón en su obra De Oratore. Se basa en asociar información con lugares físicos familiares. Al imaginar esos espacios, se recuperan los datos vinculados a ellos.
Por ejemplo, para memorizar una lista de la compra, se pueden asociar los productos con diferentes estancias de una casa: la leche en la cocina, el detergente en el baño, las frutas en el salón. Al recorrer mentalmente la casa, los objetos aparecen con mayor facilidad.
Este método aprovecha la fortaleza del cerebro para recordar ubicaciones y entornos, lo que lo convierte en una de las herramientas más eficaces para mejorar la memoria visual.
La técnica secreta para estimular la memoria fotográfica
El segundo hábito habitual es el uso de los puntos de anclaje, una técnica basada en emparejar números, letras o conceptos con imágenes que riman o asociaciones visuales familiares.
Por ejemplo, se puede relacionar el número uno con el humo, el dos con la tos, el tres con un pez o el cuatro con el gato, y así sucesivamente. Sirve para todo, por ejemplo, para una lista de cosas puedes relacionar la A con un avión, la B con un barco y la C con una casa.
El objetivo es crear ganchos mentales que hagan que la información sea más fácil de recuperar. Cuanto más visual, absurda o creativa sea la asociación, más fuerte será el recuerdo.
Esta técnica no se usa sólo con números, también se adapta a discursos, exposiciones, estudios o listas complejas de datos.
El método militar para estimular tu cerebro y que puedes aplicar mañana
El tercer hábito se encuentra en el llamado Método Militar, utilizado en programas de entrenamiento de agentes y personal militar para mejorar la capacidad de memorización visual.
Este método requiere disciplina, constancia y al menos un mes de práctica diaria sin interrupciones. Consiste en estudiar textos en una habitación oscura utilizando una luz que se enciende y apaga rápidamente para imprimir las palabras en la mente.
El procedimiento se basa en exponer durante una fracción de segundo un fragmento de texto, apagar la luz y tratar de visualizar lo leído. Cuando la imagen mental se desvanece, se repite el proceso hasta recordar el contenido completo.
La práctica diaria, durante al menos 15 a 20 minutos, ha demostrado mejorar significativamente la retención visual. Aunque exige paciencia, se considera una técnica eficaz para potenciar la memoria. De hecho, también es una prueba de que los juegos ayudan a estimular la mente.
