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Hay frases que la crianza respetuosa no recomienda que digas a los hijos, pero otras sí que pueden ser muy útiles para que los niños aprendan y te hagan caso. Por ejemplo, cuando quieres que se calme y aprenda a entender sus sentimientos.
Lejos de perder los nervios, castigarle, gritarte o intentar hablarle de una forma extraña, el experto en disciplina positiva y psicólogo infantil Álvaro Bilbao ha propuesta una alternativa que puedes usar en menos de 20 segundos.
Se trata de una frase súper poderosa de únicamente cuatro palabras: «Es normal sentirse así». Con este pequeño detalle, el enfoque puede cambiar por completo.
La frase corta para calmar a un niño en menos de 20 segundos, según un psicólogo infantil
La expresión «Es normal sentirse así» es considerada por psicólogos infantiles como una de las herramientas más eficaces para tranquilizar a un niño cuando atraviesa un momento emocional complicado. Su fuerza reside en un principio básico: validar las emociones.
Según los especialistas, cuando un niño llora, se frustra, tiene miedo o está desbordado, lo que más necesita no es una solución inmediata ni un razonamiento complejo, sino sentir que lo que está experimentando no está mal, que su reacción es humana y que no debe avergonzarse por ello.
En contra de lo que algunos padres piensan, esta validación disminuye el estrés emocional casi de inmediato porque el pequeño deja de sentir que su emoción es inadecuada o excesiva. Y no, no lo estás malcriando ni significa que no sepas poner límites.
La realidad es que otras frases que parecen positivas como «No pasa nada», «No llores por eso» o «Eso es una tontería» sólo provocan que desvalorices la emoción del niño, lo que genera más tensión y, a largo plazo, dificulta la gestión emocional.
Por qué la psicología recomienda que valides las emociones de tus hijos
La clave está en que normalizar las emociones permite que el niño deje de luchar contra lo que siente. Cuando un adulto invalida la emoción, el pequeño interpreta que está haciendo algo mal, que no debería sentir eso o que su reacción es exagerada.
Esto aumenta su ansiedad, incrementa el llanto y prolonga el malestar. En cambio, cuando escucha «Es normal sentirse así», el mensaje es completamente distinto. A partir de ese momento puede aceptar y entender lo que está sintiendo.
De hecho, tiene una base científica. Esta validación activa un efecto inmediato en el sistema nervioso, lo que reduce la tensión interna y prepara al niño para recuperar la calma.
Por qué debes hacer caso a Álvaro Bilbao, psicólogo experto en educación infantil
Con una trayectoria que incluye colaboraciones con la Organización Mundial de la Salud, la Unión Europea y el Children Center de Nueva York, Álvaro Bilbao combina la ciencia con la experiencia personal.
«Llevo toda mi vida profesional ayudando a familias; conozco el funcionamiento del cerebro y los estudios que avalan la educación en positivo, pero mi experiencia más valiosa ha sido educar a mis propios hijos», ha afirmado en su cuenta oficial.
Además habla desde la empatía, ya que reconoce que es el primero que a veces siente frustración o duda de su papel como padre, pero ha aprendido a educar de una manera distinta a como fue educado.
Por ello imparte desde 2010 formaciones y cursos en línea donde enseña a madres y padres a guiar sin gritar, a corregir sin castigar y a educar desde la calma.
