Cenar ligero no es sinónimo de cenar incompleto. Y es que en la necesidad de querer cenar ligero para adelgazar, o bien para poder conciliar el sueño, muchas personas cometen el grave error de hacerlo con la menor cantidad de alimentos necesarios, o en el peor de los casos sólo con yogurt y fruta, lo que termina siendo una cena contraproducente. Es por ello que es fundamental conocer qué cenar para adelgazar rápido más allá de yogurt y fruta. Descubre cómo mejorar tu alimentación de una manera consciente.
Cabe destacar que, así como es importante qué comemos, también lo es la cantidad, y a qué hora. Ello impactará de lleno en el tiempo en que nuestro cuerpo metaboliza los alimentos, y será esencial para adquirir todos los nutrientes que se requieren para el funcionamiento sin necesidad de solamente cenar yogurt y fruta. En la actualidad, el horario de la cena en España se ha prolongado entre las 22,30 horas y las 23,30, por lo que seguramente, después de cenar, ya comienzas a prepararte para dormir. Sin embargo, el cuerpo requiere de, como mínimo, entre una seis y diez horas para cumplir con todo el proceso digestivo, por lo que será difícil que si comes y te acuestas puedas hacerlo de forma más ligera o si no te sentará mal. Por lo que es recomendado que por la noche podemos comer ensaladas, o verduras, pero en porciones pequeñas y evitando acostarse inmediatamente tras cenar.
Lo que debes cenar si quieres adelgazar rápido
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Para poder cumplir con todas las necesidades nutricionales del cuerpo, y no sentir pesadez a la hora de acostarse, es importante reducir las porciones, y elegir qué alimentos combinar para poder sentir saciedad pero que sean de fácil digestión. Sin embargo, es importante tener en cuenta que esto puede variar según las ingestas que realizas a lo largo del día, y cómo es tu metabolismo, entre otros factores que pueden afectar el proceso digestivo.
Según la Fundación Dieta Mediterránea, «las verduras deberían estar presentes tanto en la comida como en la cena, aproximadamente dos raciones en cada toma. Por lo menos una de ellas debe ser cruda. La variedad de colores y texturas aporta diversidad de antioxidantes y de sustancias protectoras», por lo que serán las grandes protagonistas de los almuerzos y cenas, mientras que «los alimentos poco procesados, frescos y de temporada son los más adecuados».
Por su parte, también es importante el «consumo diario de pasta, arroz y cereales es indispensable por su composición rica en carbohidratos. Nos aportan una parte importante de energía necesaria para nuestras actividades» cotidianas. Mientras que el yogurt y los lácteos son más recomendados para la merienda o el desayuno.
Según la Academia de Nutrición y Dietética española, «el postre ideal para cualquier comida o cena, es la fruta fresca, de temporada. Higos (70 Kcal / 100 g), plátanos (89 Kcal / 100 g) o uvas (68 Kcal / 100 g) son los más calóricos y aun así, su aporte energético no supera las 100 kilocalorías por cada 100 gramos, muy lejos de las más de 300 kilocalorías que aporta una rosquilla o una bolsa de aperitivos fritos».
En ese sentido, desde la entidad mencionada destacan que tomar al menos 3 raciones al día, no es una cuestión de calorías, sino de salud.
¿Por qué es importante cenar ligero para adelgazar rápido?
Hay varias razones por las cuales cenar temprano puede ser muy beneficioso para tu salud. Una de ellas es una mejor digestión y funcionamiento del metabolismo, ya que cenar comidas pesadas antes de acostarse puede generar malestar estomacal e indigestión, ya que el organismo requiere de un trabajo doble si digiere los alimentos mientras la persona está en reposo.
Por otra parte, cenar ligero nos ayuda a controlar el peso: esto es, hacer comidas bajas en calorías y grasas ayuda a que se logre un equilibrio entre las calorías que consumimos y las que quemamos durante el día, y evitar que no se quemen durante el tiempo en que se descansa.
Una cena más suave y sencilla para adelgazar rápido impactará indirectamente en la salud cardiovascular porque se eligen mejor los alimentos a ingerir; contribuye a regular los niveles de azúcar en sangre, así como también será beneficioso para prevenir problemas intestinales, como el reflujo, la acidez, el síndrome del intestino irritable, entre otros.
Finalmente, también ayudará a conciliar mejor el sueño, evitando la sensación de pesadez y malestar, favoreciendo el sueño profundo y reparador.
¿Qué otros hábitos hacen bien a la hora de cenar?
En un mundo donde todo es para ayer, la ansiedad y la irritabilidad están a flor de piel de manera constante. Es necesario que, para que el cuerpo descanse y logre reponerse de los niveles de estrés a los que estamos expuesto, se trabaje en hábitos más saludables.
Por ejemplo, tomarse un tiempo para la cena o el almuerzo, evitar comer parado, tomar agua mientras comemos, y masticar los bocados las veces que sea necesario son sólo algunos de los hábitos que se pueden mejorar y que impactarán de lleno en el cuidado de nuestro cuerpo, generando bienestar.