El rasgo común que comparten todas las personas que viven 100 años

El rasgo común que comparten todas las personas que viven 100 años

Vivir un siglo completo es un logro que pocos alcanzan, y quienes llegan suelen compartir características clave que van más allá de la genética. La longevidad está íntimamente relacionada con hábitos saludables, como una alimentación equilibrada, la actividad física regular y el manejo del estrés. Pero no todo es cuestión de salud física llegar a los 100 años. Mantener conexiones sociales sólidas, una actitud optimista y un propósito en la vida también desempeñan un papel crucial. Estas personas muestran una extraordinaria capacidad para adaptarse a los cambios, lo que les permite enfrentar los retos del tiempo con resiliencia y determinación.

Un equipo de expertos del Instituto de Envejecimiento de la Universidad de Newcastle y la Facultad de Medicina de la Universidad de Keio, en Tokio, «exploró qué procesos biológicos y patológicos pueden ser los más importantes para un envejecimiento exitoso después de los 100 años. Identificaron que para vivir más de 100 años es necesario mantener baja la inflamación en el cuerpo y largos los telómeros (que son la parte de las células humanas que afecta el modo en que nuestras células envejecen)». Además de vivir más años, la calidad de vida de estas personas suele ser notable. Siguen activas, ya sea física, mental o socialmente, lo que promueve su bienestar general. En muchas regiones del mundo, como las Zonas Azules, se encuentran ejemplos fascinantes de centenarios que combinan dieta rica en alimentos naturales, vida comunitaria activa y una fuerte conexión espiritual. Asimismo, el equilibrio emocional parece ser un factor común: evitar el estrés crónico y mantener una mente abierta a los cambios de mejora.

Rasgos comunes de las personas que viven 100 años

Dieta equilibrada y basada en alimentos naturales

La mayoría de las personas longevas tienen una dieta rica en frutas, verduras, legumbres, granos enteros y grasas saludables como las que prevalecen en el aceite de oliva y los frutos secos.

El Centro Médico Regional St. Mary’s en Enid, Oklahoma explica que, en lugares, como las Zonas Azules (Japón, Italia, Grecia, Costa Rica y California), cuando comen alimentos de origen animal, como carne, huevos, pescado y lácteos, los utilizan para dar sabor a los platos en lugar de ser el foco principal de la comida o se disfrutan como alimentos de celebración. Además, se observa un consumo mínimo de productos procesados y azúcares refinados.

Actividad física regular

Mantenerse en movimiento es esencial. Las personas que viven más de 100 años no necesariamente practican ejercicios intensos, pero suelen incorporar la actividad física a su rutina diaria, como caminar, o realizar tareas del hogar. Estas actividades contribuyen a mantener una buena salud cardiovascular y muscular.

Sueño reparador

Dormir bien es otro factor crucial. Los centenarios suelen priorizar el descanso, y suelen dormir entre siete y nueve horas por noche. El Instituto Nacional sobre el Envejecimiento, explica que «la calidad del sueño es importante para la memoria y el estado de ánimo. En un estudio con personas mayores de 65 años, los investigadores descubrieron que quienes tenían una mala calidad del sueño tenían más dificultades para resolver problemas y concentrarse que las personas que tenían un sueño de buena calidad». Un sueño reparador contribuye a la regeneración celular, mejora la memoria y fortalece el sistema inmunológico.

Relaciones sociales fuertes

Un elemento clave en la longevidad es la conexión social. Los centenarios tienden a rodearse de familiares y amigos, manteniendo relaciones cercanas y significativas. Este apoyo emocional reduce el estrés y fomenta una vida más feliz y saludable.

Actitud positiva y manejo del estrés

La mayoría de las personas longevas tienen la capacidad de mantener una actitud optimista frente a la vida. Manejan el estrés con eficacia, ya sea a través de la meditación, la oración, la respiración profunda o simplemente tomándose el tiempo para relajarse.

Moderación del consumo de alcohol y tabaco

Si bien algunas culturas longevas permiten el consumo moderado de vino tinto u otras bebidas alcohólicas, el exceso de alcohol y el tabaquismo son evitados. «No importa la edad que tenga o cuánto tiempo haya estado fumando, varias investigaciones confirman que incluso si tiene 60 años o más y ha estado fumando durante décadas, dejar de hacerlo mejorará su salud», explica el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento. Esto reduce significativamente el riesgo de enfermedades crónicas.

Consejos para mejorar tu longevidad y llegar a los 100 años

Escoge una dieta saludable

Prioriza alimentos naturales, ricos en nutrientes, y limita los ultraprocesados y azúcares refinados. Considera incorporar elementos de la dieta mediterránea o la dieta de las Zonas Azules.

Permanece activo

Encuentra una actividad física que disfrutes, como caminar, practicar yoga o correr, y adóptala como parte de tu rutina diaria.

Cuida tu descanso

Crea una rutina nocturna que te permita descansar profundamente y recuperar energías.

Construye vínculos significativos

Dedica tiempo a tus seres queridos, fortalece tus vínculos y busca comunidades donde puedas compartir intereses y te sientas a gusto.

Reduce el estrés

Practica técnicas de relajación como la meditación o el mindfulness para evitar el estrés diario.

Establece un propósito de vida

Planifica tus metas. Reflexiona sobre tus pasiones y encuentra algo que te motive para crecer cada día.

 

 

Salir de la versión móvil