Aunque el café ofrece diversidad de beneficios para nuestro cerebro y cuerpo en general, es verdad que si abusamos puede convertirse en todo lo contrario. Hay un nuevo estudio que avisa sobre el consumo de café para los mayores de 60 años. ¿Es realmente bueno a medida que nos hacemos mayores? Luego hay otras investigaciones anteriores que dicen lo contrario, así que tenemos debate y vamos a exponer lo que dicen ambos y otros estudios, además de los diversos expertos. Lo importante es no abusar de la cafeína en ninguna edad, ni más joven ni tampoco cuando empezamos a entrar en la tercera edad.
La investigación, recogida en el medio finlandés Helsingin Sanomat, concluye que no acaba de dar buenas noticias para los bebedores empedernidos de café. «El rendimiento cerebral de quienes beben más de tres tazas al día se deteriora más rápido que el de quienes beben menos o nada de café». Los propios médicos del estudio se refieren a la cantidad de café que podemos beber o que hemos consumido durante nuestra vida. Por tanto, se centra en la cantidad que vuelve a ser la clave para saber si nos estamos cuidando bien o no. Lo que debemos hacer es tomarlo de forma moderada, de la misma forma que hacemos con otros alimentos y no debemos excedernos. Por el contrario, y en estudios anteriores, como Investigadores del CIBERESP, cuyos resultados se publicaron en European Journal of Nutrition, indicaron que no existe una relación entre el consumo de café y el deterioro de la función física, fragilidad y discapacidad en las personas estudiadas.
Expertos avisan a los mayores de 60 con el consumo de café
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El estudio de Ciberesp encontró un efecto protector en subgrupos de participantes que presentan un riesgo elevado de deterioro de la función física, fragilidad o discapacidad, como son las mujeres, hipertensos, diabéticos y obesos.
«Estos resultados ponen de manifiesto que el consumo de café no supone un riesgo a la hora de sufrir limitaciones funcionales en las personas mayores, pudiendo ser incluso beneficioso en personas que presentan un riesgo elevado», afirman los autores.
El trabajo se basó en datos del Seniors-ENRICA (Estudio de Nutrición y Riesgo Cardiovascular en España), que comenzó a realizarse en 2008-2010 sobre un total de 3.289 personas mayores de 60 años en todo el territorio nacional.
Beneficios del café para mayores de 60
Aunque el último estudio pone en duda su consumo, siempre moderado del café, esta bebida resulta ser aliada contra el párkinson y el alzhéimer, limpia las arterias, hace frente a la fatiga y previene la obesidad. Por lo que podría ser buena para mayores de 60 años.
Así lo establecen en el portal Solidaridad Intergeneracional donde dan más beneficios de esta tradicional y cotidiana bebida mundial.
Según un estudio llevado a cabo por una Universidad de Florida, las propiedades antioxidantes del café actúan como barrera frente a diferentes enfermedades neurodegenerativas, llegando a reducir el riesgo de padecerlas o a conseguir retrasar su avance. Esto ocurre porque el café actúa evitando el envejecimiento acelerado de las células.
Hay más porque se destaca que un estudio que han desarrollado en un hospital en Corea del Sur ha determinado que el café sirve para eliminar el calcio que se acumula en las arterias, que es, precisamente, el que puede derivar en un ictus o un infarto.
Posee más beneficios porque el café es un protector hepático natural, por lo que tiene beneficios para la salud del hígado; y gracias a su alto contenido de antioxidantes, y otros componentes bioactivos, ayuda a prevenir enfermedades cardíacas.
Según La Fundación Española del Corazón (FEC), «el consumo diario de hasta cuatro o cinco tazas de café se asocia directamente a una mayor longevidad y a una mayor supervivencia de la población general, ya que se ha comprobado que disminuye el riesgo de padecer enfermedades».
Estudio sobre el café y el envejecimiento
La Comunidad de Madrid investiga en el Instituto Madrileño de Estudios Avanzados (IMDEA) Alimentación un compuesto denominado harmol que se encuentra presente en el café y que mejora la calidad de vida durante el envejecimiento.
En concreto, lidera un análisis que ha mostrado que este elemento tiene efectos positivos en la función del músculo esquelético y otros parámetros metabólicos favorables en la tercera edad.
Por lo que lograron extender significativamente el ciclo vital en dos modelos de invertebrados. Además, el tratamiento con harmol mejoró la tolerancia a la glucosa, la sensibilidad a la insulina y la acumulación de lípidos hepáticos en un modelo de prediabetes. Igualmente, se observó una reducción muy significativa de la fragilidad en los animales viejos.
La vejez se asocia a la pérdida de la capacidad de las células de producir energía de forma eficiente, provocando pérdida de masa y potencia muscular y mayor debilidad en la población mayor de 80 años. Así, un tratamiento con este compuesto facilitaría la activación a nivel celular para mantener una buena salud en la vejez.