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Si hablamos de una infusión que previene el envejecimiento y te ayuda a adelgazar, probablemente la primera opción que se te viene a la cabeza es el té verde. Durante años, fue señalado como la mejor alternativa para lograr este efecto en el cuerpo humano.
Sin embargo, ahora sabemos que hay otras interesantes, ¿Conoces otras bebidas calientes que sean capaces de combatir el daño que el paso del tiempo produce en las células y contribuyan a que bajes de peso?
El té blanco es el secreto mejor guardado de las personas que están intentando adelgazar y que temen por el deterioro de su organismo a largo plazo.
Así es la infusión que previene el envejecimiento
De todas las infusiones que aportan antioxidantes y son beneficiosas para el organismo y su salud, las variedades de té suelen estar entre las más sugeridas por aquellos profesionales de la salud que proponen a sus pacientes dietas equilibradas.
El té verde es la estrella indiscutible de los tratamientos antienvejecimiento, pero eso no significa que puedas sustituirlo por otros. El té blanco es una de las alternativas más efectivas que existen, por su enorme cantidad de propiedades.
Este producto se genera a partir de la cosecha de la planta. Las hojas y los brotes se dejan marchitar ligeramente al sol y luego se secan. El procedimiento hace que mantenga casi la totalidad de sus nutrientes, y eso explica por qué el té blanco tiene un sabor más suave y menos astringente que el té verde o el té negro.
Como revelan los Institutos de Salud de los EE.UU., el té blanco, en alguna de sus versiones más poderosas, es aún más antioxidante que el té verde. ¡Aprovecha que no es tan conocido para comprarlo a buen precio y convertirlo en tu infusión para iniciar el día o para antes de irte a dormir!
Beneficios de la infusión que previene el envejecimiento
Aumento del metabolismo
Los polifenoles y catequinas del té blanco incrementan la tasa metabólica basal. Es decir, tu cuerpo quemará más calorías en reposo y no tendrás tantos problemas para mantenerte en tu peso ideal.
Una dieta perfecta, que incluya el té blanco como infusión, debería ser acompañada por una rutina de ejercicios cardio.
Estimulación de la quema de grasas
Hagas actividad física o no, los estudios han demostrado que ciertos compuestos del té blanco, como la cafeína y las catequinas, potencian la lipólisis. Básicamente, éste es el proceso fisiológico por el cual el organismo descompone las grasas que almacena para utilizarlas como fuente de energía.
Inhibición de la formación de nuevas células grasas
El té blanco no sólo favorece la eliminación de los depósitos de grasa sino que impide que se sigan formando. En concreto, inhibe la adipogénesis.
Efecto saciante
Uno de los mayores inconvenientes que experimentan quienes pretenden bajar de peso es el apetito voraz que sienten los primeros días intentando adelgazar.
Durante esas jornadas, una taza de té blanco mantendrá tu estómago con sensación de saciedad. Así, no tendrás que recurrir a snacks poco sanos y repletos de azúcares y grasas.
Mejora la digestión
Esta infusión mejora la asimilación de los carbohidratos y las grasas, asegurándose de que no sean absorbidos tan rápido y que, en más de un caso, acaben siendo eliminados junto a las heces.
Ayuda a adelgazar
En la web de Instituto Dyn, explican que es una bebida que favorece la digestión y que promueve la eliminación de toxinas y depuración del organismo. Mientras que como hemos visto también ayuda a combatir la retención de líquidos gracias a su acción diurética.
El té es uno de los productos principales que figuran en las dietas para perder peso. En este caso, el este tipo de té es hidratante, diurético y activa el metabolismo. Y todo ello, en suma, contribuye a la quema de calorías. Además, es saciante, ya que aumenta la producción de colecistoquinina (CKK) en el intestino y esto hace que te sientas más saciado/a y que, por tanto, tengas menos ganas de comer entre horas.
Bueno para el corazón
Hay más beneficios puesto que este té es rico en flavonoides que ayudan a disminuir la hipertensión. Por tanto, otro de los beneficios del té blanco es que ayuda a reducir la presión arterial. Así que, como ves, también se trata de una bebida que aporta beneficios a nivel cardiovascular.
¿Cómo beber la infusión que previene el envejecimiento?
Si nunca has bebido té blanco, de damos a conocer de qué forma puedes hacerlo. Debes usar aproximadamente una cucharadita de té blanco por cada taza de agua.
El agua debe estar a una temperatura promedio de 80° C. Entre 75°C y 85°C está bien, pero en ningún caso vayas a utilizar agua hirviendo ya que ésta destruye los compuestos delicados del té.
El tiempo de infusión correcto es de entre dos y cinco minutos, según cómo lo quieras , si más o menos pronunciado o concentrado quieres que sea el sabor.
Si lo deseas, puedes añadirle miel o limón luego de colarlo y antes de servirlo. Algunas personas gustan de añadir una ramita de canela para aprovechar sus beneficios. ¿Cuáles? Ayuda a controlar la inflamación crónica del organismo y es un antioxidante natural, ya que protege al organismo de los daños causados por los radicales libres.
La Federación Española de la Nutrición también menciona las proteínas, hierro, calcio, zinc, potasio, selenio, vitaminas B6, C, fenoles y aldehídos de la canela.
¿Tiene contraindicaciones?
Como otras bebidas y alimentos también tiene sus contraindicaciones aunque no son muy acusadas.
Instituto Dyn concluye que no se recomienda su ingesta en determinados grupos de personas. Es el caso de las mujeres embarazadas, pues siempre es mejor que se consulte con el médico si se puede beber este té (ya que contiene teína) y en qué cantidades.
Por su parte, lactantes y niños menores de seis años es mejor que no lo tomen. El té puede alterar su sistema nervioso y provocar un aceleramiento en su comportamiento, déficit de atención o insomnio.
Y las personas que padecen anemia también deben beber té blanco, como recomendación. Al ser una infusión que detiene la coagulación a nivel sanguíneo, no se indica su consumo en las personas anémicas.