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La papada, conocida médicamente como doble mentón, es una acumulación de grasa subcutánea debajo de la mandíbula que puede afectar la apariencia facial y la autoestima de quienes la presentan. Este fenómeno puede deberse a diversos factores, como la genética, el envejecimiento, el sobrepeso o la flacidez de la piel. A medida que envejecemos, la piel pierde elasticidad y el músculo platisma del cuello puede debilitarse, lo que contribuye a la formación de la papada. Además, una dieta rica en calorías y la falta de actividad física pueden propiciar la acumulación de grasa en esta zona.
Para abordar este problema estético, existen múltiples estrategias que van desde ejercicios faciales y cambios en el estilo de vida hasta tratamientos médicos y quirúrgicos. La elección del método adecuado depende de la causa subyacente de la papada y de las preferencias individuales. Es fundamental saber cuáles son las opciones disponibles para tomar una decisión informada y efectiva. Los ejercicios faciales pueden ser una herramienta útil para tonificar los músculos del cuello y la mandíbula, contribuyendo a reducir la apariencia de la papada. Adoptar una rutina de cuidado facial que incluya masajes en la zona del cuello y la mandíbula puede ayudar a estimular la circulación sanguínea y mejorar la tonicidad de la piel. El uso de herramientas como rodillos de jade o gua sha puede potenciar estos efectos.
Cómo despedirse de la papada
La farmacéutica Carmen Padilla Sequera, en su cuenta de TikTok, desarrolla la importancia que presenta la cafeína para la piel.
En este caso, comenta que la cafeína tiene una acción lipolítica, es decir, «moviliza y quema la grasa», de manera que es un tratamiento excelente para la papada.
Según la experta, se puede usar aplicando antes de realizar la rutina skincare, ponemos unas gotas de este concentrado de cafeína en la mano y la aplicamos en la zona de la papada, y por «su acción se podría usar por toda la piel del rostro».
La misma experta comenta que este tratamiento también sirve para acabar con las ojeras y el modo en que actúa. Según la experta, el concentrado de cafeína al 5% sirve para bolsas en el contorno de ojos.
«Por un lado, las que se deben a hinchazón y retención de líquidos, las va a drenar y descongestionar; y las que se deben al depósito y descolgamiento de la grasa porque la cafeína tiene acción en la movilización de los depósitos de grasa».
Este concentrado de cafeína se puede encontrar en muchas farmacias.
Beso al techo
Este ejercicio consiste en levantar la cabeza hacia el techo y simular un beso, lo que ayuda a fortalecer los músculos del cuello. Para realizarlo, siéntate o párate con la espalda recta, inclina la cabeza hacia atrás mirando al techo y realiza un gesto de beso con los labios, manteniendo la posición durante 5 segundos. Repite este movimiento 15 veces.
Rotación de cuello
Este ejercicio ayuda a mejorar la flexibilidad y tonificar los músculos del cuello. Siéntate con la espalda recta y los brazos relajados. Gira lentamente la cabeza hacia la derecha hasta que tu barbilla esté alineada con tu hombro, mantén la posición durante 5 segundos y luego gira hacia la izquierda. Repite este movimiento 10 veces en cada dirección.
Sacar la lengua
Este ejercicio fortalece los músculos de la mandíbula y el cuello. Abre la boca lo más que puedas y saca la lengua lentamente, intentando tocar la barbilla con la punta. Mantén la posición durante 5 segundos y luego relaja. Repite 10 veces.
Cambios en el estilo de vida
Además de los ejercicios faciales, adoptar hábitos saludables puede poder reducir la papada:
- Dieta equilibrada: mantener una alimentación rica en frutas, verduras, proteínas magras y granos integrales ayuda a controlar el peso y prevenir la acumulación de grasa en el área submentoniana. Reducir la ingesta de alimentos procesados y azúcares también es beneficioso.
- Hidratación adecuada: beber suficiente agua mantiene la piel hidratada y puede mejorar su elasticidad, lo que ayuda a reducir la flacidez.
- Postura correcta: una buena postura evita la tensión en los músculos del cuello y puede prevenir la formación de la papada. Mantén la cabeza alineada con la columna y evita encorvarte.
Tratamientos médicos y estéticos
Cuando los ejercicios y los cambios en el estilo de vida no son suficientes, existen tratamientos médicos y estéticos que pueden ayudar a eliminar la papada:
- Mesoterapia facial: consiste en la aplicación de microinyecciones de sustancias que ayudan a disolver la grasa localizada. Este tratamiento es mínimamente invasivo y puede mejorar la apariencia de la papada.
- Radiofrecuencia: según un estudio publicado en National Library of Medicine, este procedimiento utiliza ondas de radio para calentar las capas profundas de la piel, estimulando la producción de colágeno y promoviendo la firmeza de la piel. Es efectivo para reducir la flacidez y mejorar el contorno del cuello.
- Liposucción submentoniana: para casos más severos, la liposucción puede ser una opción. Este procedimiento quirúrgico elimina la grasa acumulada debajo de la barbilla, mejorando significativamente el perfil facial.
Prevención de la papada
Según la Sociedad Española de Medicina y Estética, prevenir la formación de la papada es posible mediante la adopción de hábitos saludables:
- Ejercicio regular: la actividad física ayuda a mantener un peso saludable y previene la acumulación de grasa en el cuerpo, incluida la zona submentoniana.
- Cuidado de la piel: el uso de cremas reafirmantes y protectores solares puede mantener la piel del cuello firme y prevenir la flacidez.
- Evitar cambios bruscos de peso: el aumento o bajada de peso pueden contribuir a la pérdida de elasticidad de la piel y a la formación de la papada.
Un factor que también puede influir en la formación de la papada es la genética. Algunas personas tienen una predisposición hereditaria a acumular grasa en esta zona, lo que hace que sea más difícil eliminarla únicamente con dieta y ejercicio.
En estos casos, es recomendable consultar con un especialista en dermatología o cirugía estética para evaluar opciones más efectivas y personalizadas.
En conclusión, la papada es una preocupación estética común que puede abordarse mediante una combinación de ejercicios faciales, cambios en el estilo de vida y tratamientos médicos. Es importante consultar con un profesional de la salud para determinar el enfoque más adecuado según las necesidades individuales.