Adiós a la piel rugosa, áspera y seca: soy dermatóloga y esto es lo que recomiendo para una hidratación máxima

Piel

Adiós a la piel rugosa, áspera y seca: soy dermatóloga y esto es lo que recomiendo para una hidratación máxima

Cuidar la piel durante los cambios de estación es fundamental para mantener su suavidad, elasticidad y salud. Al pasar de una estación a otra, el clima varía, la humedad ambiental cambia y nuestra piel puede resentirse. El viento, el frío o la mayor exposición solar afectan la barrera cutánea, dejándola vulnerable. Como resultado, es común notar la piel más rugosa, seca o áspera. Estos signos no solo son incómodos, sino que también pueden ser el primer indicio de un daño más profundo.

La Dra. Leire Barrutia, especialista en dermatología, asegura que con la mayor exposición solar, los alergenos ambientales y los cambios de temperatura, la barrera cutánea se puede alterar, y podemos notar la piel rugosa, áspera y seca. Cuando no cuidamos la piel de forma adecuada, esta puede reaccionar de diversas formas. La piel rugosa es una de las señales más evidentes: está tirante, con textura irregular y, en algunos casos, puede presentar descamación o enrojecimiento. Para contrarrestar estos efectos, es importante hidratar profundamente, usar protector solar todo el año, evitar duchas muy calientes y optar por productos suaves que no alteren el pH de la piel. Con constancia, es posible mantener una piel suave y saludable en cualquier estación.

Consecuencias de no cuidar la piel en los cambios de estación

No prestar atención a la salud de la epidermis puede generar diversas molestias y problemas que afectan tanto la apariencia como la función protectora de la epidermis. Algunas de las principales consecuencias son:

Piel rugosa y áspera

Es la más común, causada por la pérdida de hidratación y daño en la barrera cutánea. «Si notáis rugosidad, asperezas o queratosis pilar, escoged una crema hidratante con urea, como Mixa Urea Cica Repair+, que combina la urea al 10% con niacinamida», recomienda la Dra. Leire Barrutia.

Sequedad extrema

Sensación de tirantez e incomodidad en la piel, sobre todo en zonas como manos, codos y rostro.

Descamación

Cuando la piel pierde sus células muertas de forma desordenada, generando parches secos y visibles.

Sensibilidad aumentada

La piel reacciona con ardor, enrojecimiento o picor ante estímulos leves.

Irritaciones o brotes

Especialmente si se combinan factores como el viento, el sol o productos agresivos.

Aparición prematura de arrugas

La falta de hidratación puede acelerar el envejecimiento cutáneo. En este caso, Days of Confidence propone el Complejo Radiance, perfecto para nutrir la piel desde dentro desde primera hora del día.

Manchas o hiperpigmentación

Por exposición solar sin protección adecuada. «Durante el verano, la exposición solar suele ser más intensa. En respuesta a esta mayor exposición a la radiación ultravioleta, las células de nuestra piel, concretamente los melanocitos, se defienden de esta agresión aumentando la producción de melanina. Cuando se ha ido acumulando daño solar, año tras año, la pigmentación pasa a ser desordenada porque nuestra piel va perdiendo la capacidad de reparar el daño del sol, y es en ese momento cuando aparecen las manchas, o léntigos solares», explica la Dra. Iris González Villanueva, de la Unidad de Dermatología de Enea Clínica.

Pérdida de elasticidad

Una piel maltratada pierde firmeza y luce apagada o fatigada. Según la doctora Beatriz Beltrán, es factible realizar técnicas combinadas: «Es importante actuar contra la flacidez y la pérdida de colágeno con técnicas como la radiofrecuencia corporal o el láser tensor TightSculpting, que combina láser erbio y neodimio. Los precios varían entre 300 y 600 euros por sesión, con una frecuencia recomendada de una sesión mensual durante 5 meses».

Trucos efectivos para una piel saludable

Adoptar una rutina adecuada es la mejor forma de prevenir la piel rugosa, especialmente cuando cambian las condiciones ambientales.

Hidrata a diario, mañana y noche

«Es esencial hidratar la piel cada día y debemos escoger una hidratante específica para nuestro problema», sostiene la Dra. Leire Barrutia.

En Saluvital proponen regenerar, hidratar y nutrir el rostro durante 24 horas con su crema facial Hyaluvital para hidratar intensamente la piel y protegerla del sol, ya que incorpora una protección solar FPS 15.

Protege tu piel del sol siempre

Aunque no haga calor, el protector solar es imprescindible durante todo el año. Elige uno con SPF 30 o más. Para disfrutar de esta temporada sin descuidar la epidermis, Dia presenta su renovada gama solar, compuesta por 22 referencias con SPF 50+, sin alcohol, testadas dermatológicamente y formuladas para proteger todo tipo de pieles, incluidas las más sensibles.

Además, pensando en un cuidado integral durante los días de calor, propone un kit de verano con productos esenciales, como el protector solar capilar bifásico, crema antifricción resistente al sudor, y los productos de su nueva línea corporal Sicilian Lemon.

Evita duchas muy calientes

El agua caliente puede eliminar los aceites naturales de la piel. Opta por duchas tibias y cortas.

Exfolia suavemente una vez por semana

La exfoliación elimina células muertas y mejora la textura de la piel, pero no debe ser agresiva.

Usa productos adecuados a tu tipo de piel

Evita jabones o geles con alcohol o fragancias fuertes. Prefiere fórmulas suaves y sin sulfatos.

Mantén una buena hidratación interna

Bebe suficiente agua a lo largo del día para que tu piel se mantenga elástica y saludable desde dentro.

Incluye una alimentación rica en antioxidantes

Frutas, verduras y grasas saludables ayudan a regenerar y proteger la piel.

Refuerza la barrera cutánea en climas extremos

Usa bálsamos o cremas más densas en invierno, y geles ligeros en verano.

Consejos adicionales para una piel saludable

Además de los trucos mencionados, puedes seguir estos consejos para potenciar los resultados y prevenir la piel rugosa durante todo el año:

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