Paula Echevarría se pone salvaje

En plena recta final para dar la bienvenida oficial al verano, son muchos los que desean inaugurar la nueva estación por todo lo alto. Es el caso de Paula Echevarría, quien ha sido una de las invitadas más destacadas de la fiesta con temática africana organizada por Tacha, el centro de belleza preferido de las ‘celebs’. Así, entre bongos de cerámica y piel, hamacas de crochet y muchos turbantes, la asturiana no ha dejado indiferente a nadie con su estilismo más ‘salvaje’.

Esto empieza a ser un clásico! Dar la bienvenida al verano con la fiesta de @tachabeauty! Esta vez tocó fiesta africana, muchos amigos y muchas risas! Gracias Nata por este rato tan bueno! Enhorabuena a @justbecomunicacion_es por una organización y una decoración maravillosa! #TachaAfricanParty 🦓🐆🦁🐒🦒

Una publicación compartida por Paula Echevarria (@pau_eche) el 19 de Jun de 2018 a las 4:30 PDT

Para mimetizarse con el ambiente, la de Candás ha apostado por un conjunto africano protagonizado por una falda amarilla con volantes hasta la rodilla con caballos rojos estampados (112 euros) firmada por Tufafii, que ha acompañado con un top blanco anudado, un llamativo collar de inspiración étnica y un voluminoso turbante en tonos tierra y negros, con lunares blancos. La actriz de Los Nuestros 2 ha finalizado su ‘outfit’ más animal con unas alpargatas de tiras cruzadas de Fetiche Suances y un bolso redondo de rafia, uno de los complementos estrella de esta temporada.

Como era de esperar, la ‘influencer’ no ha dudado compartir con sus millones de seguidores alguno de los divertidos momentos que ha vivido en la primera gran fiesta del verano, donde ha estado rodeada de amigos y, por supuesto, mucho estilo. La actriz Marta Hazas, la modelo Laura Sánchez, los actores Alejo Sauras y Maxi Iglesias, la diseñadora Vicky Martín Berrocal y Alicia Hernández, gran amiga de Echevarría y directora creativa de Dolores Promesas, son otras de las ‘celebs’ que no han dudado en dar una calurosa (y animada) bienvenida al verano 2018 y estar a la altura del divertido ‘dress code’.