El día que Felipe VI pisó la Casa Blanca siendo guardiamarina de Elcano

La princesa Leonor está disfrutando de la segunda escala de la travesía a bordo del buque escuela Juan Sebastián Elcano. La hija mayor de los Reyes don Felipe y doña Letizia partió desde Cádiz el pasado 11 de enero y, tras su paso por Santa Cruz de Tenerife, ya se encuentra en Las Palmas. El siguiente paso serán varias semanas en alta mar rumbo al continente americano, donde la nave llegará a mitad del mes de febrero.

La llegada de Leonor a Las Palmas ha coincidido más o menos en el tiempo con los actos con motivo de la toma de posesión de Donald Trump como nuevo presidente de Estados Unidos. La princesa terminará su crucero en Nueva York -a diferencia del resto de sus compañeros- y desde allí volverá en avión a España para la parte final de su formación en otros buques de la Armada.

Aunque todavía no se han confirmado los actos oficiales en los que participará Leonor durante los meses que esté a bordo del buque escuela, no hay que olvidar que la nave es una embajada itinerante y que, además, su padre participó en varias citas mientras era un guardiamarina más. Entre ellas, un encuentro con un presidente estadounidense que ahora merece la pena recordar.

El encuentro de Felipe VI y Reagan

Fue en mayo de 1987 cuando el buque escuela llegó al puerto de Baltimore y se aprovechó esta última escala antes de volver a España para que don Felipe se trasladara hasta Washington D.C. para entrevistarse con el entonces presidente, Ronald Reagan. Un encuentro que tuvo lugar el 27 de mayo en la Casa Blanca.

Según las crónicas de la época, don Felipe estuvo unos ocho minutos con el presidente. Vestido con el uniforme blanco de la Armada, el Rey le entregó a Reagan una carta de su padre, Juan Carlos I. Fue un encuentro privado y meramente protocolario, en el que participaron también algunos representantes de la administración y personal de la Casa de S.M. el Rey, como José Antonio Alcina.

Durante el encuentro, el entonces príncipe de Asturias le contó a Reagan algunos detalles de su entrenamiento en el buque escuela, mientras que el presidente le habló de su rancho. Se habló también de un viaje de los Reyes Juan Carlos y Sofía previsto para ese mismo otoño.

Tal como trascendió, fue el Rey Juan Carlos el que se puso en contacto personalmente con Reagan para organizar la entrevista, después de que la Casa Blanca hubiera informado de que consideraba suficiente un encuentro con el secretario de Estado, George Shultz. Con él, don Felipe pudo compartir un almuerzo.

Además, durante esta visita a Washington, el Rey Felipe colocó una corona de flores frente a la estatua de Isabel la Católica en la entrada de la OEA y participó en una recepción en la embajada de España.