Aunque la operación bikini haya comenzado, aún quedan los más rezagados que buscan múltiples formas de bajar peso y de tonificarse lo más rápido posible. Por el momento, no hay dietas o trucos infalibles que atajen los meses de entrenamiento duro. Solo los expertos en la materia te ayudarán a reducir esos plazos. En este sentido, en COOL hemos indagado en el tema y nos hemos planteado una pregunta: ¿cuáles son las formas de activar el metabolismo para perder peso? Pues bien, hemos encontrado 12 que os vamos a detallar a continuación.
Desayunar
El que dijo que esta es la comida más importante del día estaba en lo cierto. La razón principal es porque aporta energía para afrontar el día y, además, acelera el metabolismo. Varios estudios afirman que saltarse esta comida está relacionado con un mayor riesgo de padecer obesidad.
Tomar café o té
La cafeína de ambas bebidas estimula el sistema nervioso central. Una dosis diaria puede activar el metabolismo entre un 5 y un 8%. En el caso del té se puede incrementar esa cifra hasta el 12%. Muchos estudios han concluido que los antioxidantes del té, llamados catequina, son los que proporcionan ese estímulo.
Hacer cardio
Según un estudio publicado en 2011, un entrenamiento completo te puede ayudar a quemar hasta 200 calorías. En ese mismo estudio, los expertos indican que debe ser un ejercicio de corta duración y alta intensidad.
Aumentar el consumo de fibra
Varias investigaciones han concluido que ingerir fibra puede acelerar la quema de grasa hasta en un 30%. Se aconseja consumir unos 25 gramos al día, es decir, la cantidad de fruta y verduras equivalente aproximadamente a tres piezas.
Beber mucha agua
Beber dos litros de agua fría al día te puede ayudar a quemar más calorías. Y te preguntarás ¿por qué fría? Porque el organismo debe realizar un esfuerzo extra para calentarla. Por ello, el metabolismo aumentará su ritmo.
Llevar una rutina activa
Mantener una rutina activa con la realización de pequeños movimientos rutinarios. Desde estirar las piernas, subir escaleras o estar de pie para hablar por teléfono, pueden ayudarte a quemar hasta 350 calorías al día. Pero, esos movimientos deben ser complementarios a tus entrenamientos diarios.
Ingerir más vitamina D
Este tipo de vitamina es esencial para mantener el tejido muscular sano y acelerar el metabolismo. Los pescados como el salmón o el atún, la leche o los huevos son algunos de los alimentos más ricos en vitamina D.
Comer proteínas
Muchos estudios han concluido que la ingesta de proteínas aumenta la quema de calorías después de las comidas hasta en un 35%. ¿La recomendación más efectiva? Añadir a tu dieta alimentos como aguacates, nueces, judías o lácteos.
Comer más frutos secos
Lo ideal es consumir un puñado pequeño de frutos secos cada día. Sus ácidos grasos poliinsaturados, sobre todo de las nueces, ayudan a mejorar la actividad de ciertos genes que reducen la quema de grasas.
Aumentar las horas de sueño
Una mala noche puede ralentizar tu metabolismo a la mañana siguiente, reduciendo la quema de calorías hasta en un 20%. Además, la falta de sueño puede hacer que las hormonas del hambre se alteren y activen tu apetito en horas inapropiadas.
Controlar la temperatura del dormitorio
Aquellas personas que duermen en una habitación a 18°C queman un 7% más de calorías que las que duermen en una a 24°C. Los cuerpos que se encuentran en habitaciones más frescas queman energía extra para aumentar la temperatura corporal hasta los 36°C.
Reír
Puedes quemar de 10 a 20% de calorías con tan solo 10 minutos de risas. En ese estudio también se afirma que la risa está asociada a pequeños índices de estrés y un corazón más saludable.