Viajar es uno de los grandes placeres que existe. Muchos prefieren hacerlo en un coche de alta gama, otros en avión y están los que quieren escapar del mundo surcando el mar. La primera opción que se nos viene a la cabeza es hacer un crucero, ya sea largo o corto, que ofrezca todas las amenidades básicas y necesarias, pero ¿existe la versión de lujo? Hemos encontrado un velero que tiene el reconocido sello de calidad Relais & Châteaux. Viajamos en Le Ponant, uno de los veleros más exclusivos del momento.
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Su primer viaje fue en 1991
Es sinónimo de elegancia y, con sólo observarlo desde el exterior, sus imponentes líneas nos recuerdan a las de los yates, pero las velas que lo coronan revelan su verdadero cometido. Un velero legendario, cuyo viaje inaugural fue en 1991, y exhibe la esencia francesa con la que se fabricó. Este navío pertenece a la empresa especializada en cruceros de lujo, Ponant, con una flota a su cargo de 12 barcos.
Este yate fue diseñado por los mayores expertos del sector y tiene 88 metros de largo y 56 metros de alto, coronándose como uno de los navíos de vacaciones más majestuosos, selectos y lujosos del mundo. En una época en la que todo está cada vez más automatizado, el velero Le Ponant pone en relieve el arte de la navegación, combinado con la comodidad, la elegancia, la exclusividad, además de respirar sostenibilidad.
Un espacio exclusivo para 67 viajeros
A simple vista, su tamaño no puede parecer tan amplio, pero subiendo a bordo, descubrimos que tiene el tamaño perfecto para alojar a una cantidad selecta de viajantes. Cinco estrellas que tienen la capacidad para 67 viajeros, una tripulación de 30 personas, además de tres cubiertas que ofrecen todo tipo de amenidades como motos de agua, jacuzzi, una piscina de agua salada y una zona de estar donde leer un buen libro con una copa del vino más selecto, además de unas vistas que son incomparables.
Su decoración destaca por la exclusividad, puesto que todo el mobiliario es de alta gama y creado por el estudio de interiorismo Jean-Philippe Nuel y Stirling Design International.
Cocina de mercado
La oferta gastronómica a bordo de Le Ponant está basada siempre en productos frescos y cocina de mercado. Vinos, quesos y aceites de oliva de las regiones visitadas; frutas y verduras de huertos locales; podrás probar y saborear lo mejor que cada destino tiene para ofrecer.
Su compromiso con la sostenibilidad es plausible, puesto que el velero Le Ponant ha sido reconstruido con las últimas tecnologías para reducir al mínimo las emisiones contaminantes que provocan este tipo de barcos. El uso de las velas hace que no se tenga que gastar tanto combustible y que el movimiento del mismo sea natural, a la vez que cuenta son un sistema SCR que elimina las partículas más nocivas para las aguas.
Le Ponant propone destinos exclusivos
Al tener un tamaño más reducido que el de los cruceros convencionales, los puertos en los que atraca son más selectos, por lo que sus destinos se encuentran entre los más referentes. Este mes de enero, propone descubrir Cabo Verde, con una estancia de siete días visitando las islas que lo componen, además de viajar al Caribe en febrero o a Grecia en mayo.
Lo podríamos denominar como el pequeño edén del mar, una construcción de recreo que respira magia desde el primer momento en el que se izan sus velas y una promesa final de hacer un viaje por mar, sintiendo la libertad que este te regala.
