En COOL estamos constantemente mostrándoos los lanzamientos más vanguardistas y únicos en el mercado de la aviación. Y aunque la NASA nos tenga ansiosos por conocer su nuevo lanzamiento de la nave tripulada, conocida como Starliner, junto con el fabricante estadounidense de aviones Boeing, su más reciente lanzamiento merece una mención especial. La NASA ha presentado un nuevo jet supersónico al que le ha eliminado los fuertes estampidos sónicos. Pero, no sólo eso, sino que también permitirá realizar trayectos en menos tiempo. Por ejemplo, si la duración de un trayecto Nueva York-Madrid es de 7 horas, este nuevo jet logrará desplazar a sus viajeros en no más de 3 horas. Este jet supersónico diseñado por la NASA ha sido bautizado como X-59.
El nuevo avión supersónico silencioso
«Hoy en día los vuelos supersónicos traen consigo un estruendoso boom supersónico. Los que vivimos en la zona estamos familiarizados con este sonido», dijo Pam Melroy, administradora adjunta de la NASA. «Pero lo que eso significa es que está restringido en zonas pobladas, con razón. Y el X-59 va a romper esa barrera. Meticulosamente diseñado, produce un suave golpe. Un mero susurro comparado con los perturbadores estampidos del pasado», añade.
Es cierto que la misión Quesst de la NASA se lanzó en 2018 para desarrollar un avión supersónico que generase menos ruido que un avión supersónico convencional. Y, seis años más tarde han conseguido crear un concepto ambicioso: el X-59 de la NASA. «Este avión supersónico contribuirá a cambiar la forma en que viajamos, acercándonos unos a otros en mucho menos tiempo«.
El diseño del el X-59
El X-59 mide 30 metros de largo y nueve de ancho. Además, tiene un diseño peculiar, puesto que tiene un morro fino y afilado que ocupa casi un tercio de su longitud. La NASA asegura que «la nariz puntiaguda ayudará a romper las ondas de choque que normalmente resultan en un estampido sónico, un sonido similar a una explosión o un trueno para el oído humano, causado por un objeto que viaja a través del aire más rápido que la velocidad del sonido».
Menor ruido y mayor velocidad
El motivo por el cual se considera un avión supersónico es porque este tipo de vuelos pueden viajar a velocidades superiores a la del sonido, y el X-59 está diseñado para volar a 1,4 veces la velocidad del sonido o a unos 1.480 km/h. Es más, el equipo que supervisa la misión X-59 Quesst está promoviendo la idea de que el límite de velocidad supersónica se levante, tan pronto como el boom sónico no sea un problema.
«En lugar de una regla basada únicamente en la velocidad, proponemos que la regla se base en el sonido«, dijo Peter Coen, gerente de misión integrada del jet supersónico de la NASA, el X-59. «Si el sonido de un vuelo supersónico no es lo suficientemente fuerte como para molestar a nadie de abajo, no hay razón por la que el avión no pueda volar supersónico».