Charlotte Potteaux, de origen francés, ha sido la jefa de sala más joven del mundo en un tres estrellas Michelin con su trabajo en Azurmendi. Por su parte él, Felipe Barbancho, hijo de cordobés y madre granadina, aunque de corazón vasco, ha trabajado en restaurantes de la talla de Eneko, El Mirador de Ulía, o Azurmendi, entre otros. Recientemente han decidido apostar por un proyecto conjunto en la capital de Al-Ándalus, a pocos minutos andando de la Mezquita Catedral de Córdoba. Argus es el nombre del restaurante cuyo concepto fusiona lo mejor de la gastronomía vasca: el producto, y la delicadeza y savoire faire de la cocina francesa. Todo ello basado en la calidad de nuestros productos nacionales.
«Córdoba es una ciudad de cultura, de ideas, de arte, que te invita a quedarte. A nosotros nos ha dado todo, y queremos devolvérselo», explican Charlotte y Felipe.
Hemos visitado esta dirección del sur para que los dos jóvenes emprendedores nos cuenten sobre esta propuesta gastronómica que completa y eleva la oferta culinaria en la ciudad. Si algo tienen claro, según nos cuentan tras haber superado el confinamiento en este lugar, es que Córdoba es una capital que enamora a todos los sentidos. Y que ellos, al darle una vuelta, se han visto obligados a quedarse en esta tierra en la que el sol sale a vernos casi todos los días para devolver lo bueno que han estado recibiendo todo este tiempo.
«Es nuestro hobby, y disfrutados perfeccionando la gastronomía y el servicio. Nos hemos recorrido medio mundo probando restaurantes fijándonos en los detalles», cuentan ilusionados. Su intención, más allá de obtener el reconocimiento de los turistas y de quienes tengan la iniciativa de conocer Argus, es cautivar el paladar de los cordobeses. Motivo por el que decidieron abrir contra todo pronóstico esta Navidad.
A pesar de estar edificado sobre una casa típica cordobesa, han querido expresar el mismo concepto de la alta cocina que defienden a través de la decoración. Así, este restaurante sobrio y bonito a la vez; clásico pero con toques de modernidad invita tanto a jóvenes, como a mayores, a adentrarse en el universo del vino y de los sabores de la alta cocina española.
«Cuando crees que conoces mucho, te das cuenta de que en realidad no sabes nada», expone Barbancho al preguntarle por su trayectoria profesional. «Con 21 años me fui al restaurante Lasarte, de 3 estrellas Michelin, donde me formé al lado de Oneka, mi referente número 1. De ella aprendí todo. Me dio la oportunidad de ser el jefe de sala junto a ella y esa maravillosa experiencia duró 8 años».
Además, también ha trabajado como chef en eventos para miembros de la realeza. Más tarde, volvió a pasar por el restaurante El Mirador de Ulía con una estrtella, y Bertín Berasategui con dos estrellas en Tenerife, hasta que llegó a Azurmendi, donde coincidió con Charlotte.
Puedes ver la página web del restaurante Argus aquí.