Anunciábamos en los meses de Navidad el sinfín de sorpresas que el emblemático hotel Rosewood Villa Magna tenía preparadas para quienes decidieran pasar las fiestas en Madrid. Por aquellas fechas, la decoración del hotel contagiaba el espíritu navideño. Pero, a partir de hoy, y hasta el 2 de abril, el prestigioso hotel apuesta de nuevo por los espacios efímeros con vertiente gastronómica y lúdica. Esta vez, aprovechando que el frío nos sigue acompañando y que es la mejor época para esquiar, el hotel ha querido transformar una zona de su espacio exterior en un elegante chalet alpino.
Denominado ‘El Chalet’, este coqueto lugar presenta el aspecto exterior de una típica cabaña de madera de los Alpes. Rosewood Villa Magna nos invita a viajar, desde Madrid, y a través de este acogedor espacio, a las localidades alpinas como Gstaad o Zermatt.
Arropados por listones de madera y ventanas cuarteadas, en su interior podemos encontrar todo un universo lleno de detalles que nos trasladan a uno de los lugares más fríos –pero más mágicos y hogareños– del mundo. Rodeados de tablas de esquí, raquetas y trineos de madera vintage, mantas de pelo, estufas de leña de hierro fundido, manteles de cuadros… Nos encontramos en una cabaña alpina en pleno paseo de la Castellana.
Vive un viaje gastronómico a los Alpes Suizos con ‘El Chalet’ de Rosewood Villa Magna, en el cual podrás degustar el fantástico menú alpino o algunos de los exquisitos platos de su carta, en una acogedora cabaña de madera… ¡Una auténtica experiencia gastronómica suiza! La propuesta trasladará nuestro paladar a las mejores recetas de una región especialmente rica y variada, tanto en ingredientes y recetario, como en la forma de preparar y disfrutar de los platos.
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Te recomendamos probar la fondue, la raclette suiza y el Wiener Schnitzel de ternera, porque además de ser delicias suizas, son también una atractiva propuesta para compartir en familia o con amigos y tener una experiencia gastronómica diferente y memorable. Otro plato que no podrá faltar en tu selección es la Apple Strudel, acompañada de helado de vainilla. La guinda del pastel la proporciona la célebre firma Perrier Jouet, la cual ha seleccionado sus mejores espumosos para aquellos clientes que quieran acompañar sus deliciosos platos de ‘El Chalet’ con un exquisito champagne.
Desde las ventanas de ‘El Chalet’ se disfrutan las vistas al pulcro jardín del hotel, lo que acrecienta la sensación de estar en plena naturaleza y de encontrarse en una atmósfera propia de otras latitudes. El espacio gastronómico conecta con una terraza al aire libre en la cual se puede disfrutar de la sobremesa y degustar algunos de los platos del restaurante. Una experiencia única e irrepetible, ya que, como mencionábamos al principio, esta segunda y última propuesta invernal del majestuoso hotel, finalizará el 2 de abril. ¿Te lo vas a perder?