Visitamos el CAC López de la Serna de la mano de su directora Jimena López de la Serna quien nos descubre la obra del artista norteamericano Phil Frost (Jamestown, Nueva York, 1973). «Es un autor que me encanta porque es diferente, porque tiene su propio lenguaje. En el arte hoy día es difícil ver cosas nuevas. Pinta lo blanco con typex y recoge todos los objetos que encuentra por la calle y que le gustan para incluirlos en sus obras y crear así diferentes capas» explica Jimena López de la Serna.
En esta exposición que se acaba de inaugurar en Madrid, «el artista presenta su colección de 16 puertas, que están todas firmadas por detrás, su trabajo más reciente; un trabajo que tardó en seis años en concluir», añade López de la Serna, mientras recorre el Centro de Arte Contemporáneo y muestra la colección a COOLthelifestyle.
El Centro de Arte Contemporáneo Lopez de la Serna, un espacio cultural que ha abierto recientemente sus puertas en la capital de España, va más allá de lo que es una galería de arte convencional. «Aquí exponemos obra de todos los artistas que nos gustan, y tenemos más libertad que en una galería de arte, que sólo exponen a los artistas que representa el galerista», aclara López de la Serna. «Se trata de que el público que venga aprenda y profundice en las obras y en el artista. Y cuanta más gente nos visite, mejor; porque así acercamos el arte contemporáneo a los madrileños», explica Jimena.
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Familia López de la Serna
Tras más de 25 años de trayectoria contribuyendo a la escena artística de nuestro país, siendo en algunos casos pioneros en la elección de los artistas presentados, a principios de este año, la familia López de la Serna inició una nueva etapa en el mundo del arte y creó el CAC en Madrid: un centro de arte contemporáneo privado que tiene por objetivo impulsar proyectos y colaboraciones con artistas e instituciones nacionales e internacionales, siempre con un enfoque singular. Ubicado en un emblemático espacio expositivo en la urbanización madrileña La Florida; este centro, abierto al público, se inauguró con una singular exposición de Peter Halley de obra emblemática de los años 80 y 90, en febrero.
Un poco de historia
La Galería Javier López -de Javier López, padre de Jimena López de la Serna- abrió sus puertas en Londres en 1995 con el objetivo de mostrar una visión personal y única del arte contemporáneo a través de proyectos comisariados y apostando tanto por jóvenes creadores como por artistas consagrados. En ese momento se programaron exposiciones tan innovadoras como de X-Art Foundation con Hélio Oiticica, Martin Creed, el proyecto de Thomas Ruff sobre Herzog & de Meuron o Alix Lambert sobre la identidad de género.
En 1996 la Galería Javier López se trasladó a Madrid para dar continuidad a ese proyecto y presentar por primera vez en España exposiciones que, en muchos casos, se adelantaron a las tendencias que después marcarían el panorama y a las corrientes de aquellos años, en los que la fotografía también ocupó un lugar destacado. Artistas como Andreas Gursky, Ed Ruscha, o Hiroshi Sugimoto, entre otros, protagonizaron las exposiciones de ese periodo.
Con la idea de dar una visión más amplia del arte contemporáneo, esta galería siempre apostó por la alternancia de artistas emergentes con otros más consagrados, y así se realizaron exposiciones de Alex Katz y Donald Judd en 1998. A partir del año 2000, se mostraron artistas de talla internacional como Tatsuo Miyajima, Liam Gillick, Nobuyoshi Araki, Jenny Holzer y Dan Flavin, Sarah Morris, Robert Indiana, Jack Pierson y Francesco Clemente.
Entre 2006 y 2013 la galería contó con un espacio expositivo en Nueva York: Gering & López Gallery, diseñado por el arquitecto Joel Sanders y ubicado en el histórico Crown Building de la Quinta Avenida de Nueva York. Se organizaron las primeras exposiciones de artistas tan rompedores entonces como reconocidos en la actualidad, como Leo Villareal, KAWS y Todd James, impulsando así las carreras de estos creadores desde sus inicios.
Desde 2010 en La Florida
En noviembre de 2010, Javier López inauguró un singular espacio en Madrid para trasladar su galería desde el centro de la ciudad a una excepcional ubicación, -en un edificio diseñado por el reconocido estudio de arquitectura Vicens + Ramos-, situado en un entorno privilegiado próximo al parque nacional del Monte de El Pardo, en La Florida.
En este espacio, el diálogo entre la arquitectura y el paisaje crea un entorno inigualable, próximo a la idea de Kunsthalle. Es un lugar donde las exposiciones de arte se proyectan con un enfoque en profundidad y una duración más amplia de lo habitual para poder ofrecer una visión completa de la obra del artista expuesto.
Esta nueva etapa, hace 12 años, se inauguró con la muestra retrospectiva de Alex Katz titulada Once in a Lifetime, que fue seguida por proyectos de Jason Martin, Francesco Clemente, José María Yturralde, Kaws.
Desde 2011, la galería desarrolló sus actividades en este espacio creado para presentar una programación dinámica de creadores noveles o consolidados que realicen un trabajo excepcional e innovador en el marco de las últimas tendencias, abiertos a las técnicas más actuales y a cualquier tipo de soporte, como es el caso de Phil Frost, que esta vez presenta un trabajo con puertas. La colección se acaba de estrenar en este increíble espacio cultural y se podrá disfrutar hasta febrero del 2023.
Phil Frost, el artista
CAC López de la Serna, en la que es su segunda exposición, trae la colección titulada The Lion Approaches del norteamericano Phil Frost (Jamestown, Nueva York, 1973). «El nombre de la exposición lo eligió el artista personalmente», revela Jimena, la directora, mientras explica con detalle cada una de las obras expuestas. Estudió Historia del Arte en Boston y creció rodeada tanto de piezas de nuevos talentos como de obras de artistas consagrados.
Este es un proyecto, que abarca las dos últimas décadas de su producción creativa, y que pone especial atención en sus últimos trabajos. Unas obras recientes – 16 puertas pintadas- que han sido elaboradas en el transcurso de los últimos seis años (de 2016 a 2021), y se pueden ver ya en el CAC López de la Serna, junto a algunas de sus otras piezas más emblemáticas.
El artista Frsot se distingue por su singular proceso creativo. El estilo de Frost integra la agudeza y fluidez del arte urbano, incorporando materiales encontrados en la calle, y la elegancia de una estética pictórica en la que adquieren protagonismo los esquemas geométricos, aportando dinamismo a sus complejas composiciones. «Se inspira en el arte callejero, en el arte urbano, apunta Jimena, pero crea arte contemporáneo». La exposición reúne obras importantes como el díptico titulado Accumulated Field of Perceptive Experience (2002 – 2014) y la monumental Divergence of Opinion (2014 – 2018), dos magníficos ejemplos que formaron parte de Magnetic Shift en el Empire State Plaza de Albany (Nueva York).
Frost forma parte del reducido grupo de artistas elegidos para exponer en conversación con las obras de la Colección Rockefeller, que cuenta con piezas de Clyfford Still, Naum Gabo, Ellsworth Kelly y David Smith, entre otros. Frost de hecho reconoce que estas obras maestras «le inspiraron en los comienzos de su carrera como artista autodidacta en la década de los noventa».
‘Graffiti’ como inspiración
Es en ese ambiente, alternativo y neoyorquino, es donde Frost encuentra su sitio dentro del movimiento del graffiti, y es donde crea imágenes de una gran potencia expresiva, reconocibles por la yuxtaposición de patrones blancos, con símbolos y letras, y en distintas capas superpuestas en profundidad. «Utiliza typex para crear los blancos», descubre Jimena.
El artista define su personal lenguaje visual como “retratos intuitivos perceptivos” de personajes con rostros alargados y cuellos estilizados con los comunica una experiencia sensorial. Estas figuras con reminiscencias del arte primitivo, que nos evocan máscaras tribales o esculturas totémicas, se complementan con patrones geométricos y signos gráficos que se repiten rítmicamente en los distintos planos o capas de la obra, generando una estructura articulada, tanto por la intensidad cromática como por el contraste entre positivo y negativo.
De los paseos arqueológicos por zonas rurales del oeste de Massachusetss durante su infancia le viene Frost su interés por incorporar en sus obras todo tipo de objetos recuperados: páginas de cómic y periódicos, cajas, botellas, botes, botones, hojas, plumas, chapas, telas, bates de béisbol, guantes de boxeo, cerraduras, llaves, brochas, números o letras metálicas, etc… Frost utiliza estos elementos en sus cuadros y lienzos, en los que se acumulan acrílico, esmalte en spray, líquido corrector, tinta y papel, entre otros. El volumen de los elementos reutilizados aporta una tridimensionalidad real a las piezas, como se puede apreciar en las obras sobre puertas usadas que ha rescatado como soporte y que hoy ocupan un lugar destacado en esta exposición.
Muy premiado
Phil Frost es reconocido con el Pernod Award a los 23 años y celebra su primera exposición individual en una galería de Nueva York a los 25. Su primera exposición institucional tiene lugar en la Pennsylvania Academy of Fine Arts en 2002, ese mismo año recibe una beca de la New York Foundation for the Arts. En 2004 es galardonado con el Pollock – Krasner Foundation Award y es becado por The Louis Comfort Tiffany Foundation. Entre sus exposiciones individuales cabe mencionar la del University Art Museum de Albany, el Spiral Museum Cultural Center de Tokio y más recientemente en el CAC Málaga.
Entre las principales colecciones públicas que cuentan con su obra se encuentran la del LACMA – Los Angeles County Museum of Art, Princeton University Art Museum de Nueva Jersey, John D. & Catherine T. MacArthur Foundation de Chicago, Wake Forest University de Winston – Salem (Carolina del Norte), The Progressive Corporation en Ohio, Colección Solo en Madrid o la Fundación Canaria para el Desarrollo de la Pintura de Las Palmas.
