Quien tiene un buen fondo de armario tiene un tesoro, no nos cansaremos de decirlo. Hay prendas y prendas: de temporada, de tendencia, piezas únicas y las aliadas. Estas últimas son las que forman parte de un buen fondo de armario pues son clásicos básicos y, además, atemporales. Funcionan siempre, pueden combinarse entre sí y también con prendas de tendencia para crear un estilismo que se adecue a diferentes estilos. Hablamos del polo blanco, la camisa de lino, las bermudas, los náuticos y las gafas de sol de tipo aviador. Todo va con todo y nunca te cansas de llevarlas puestas.
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Camisa de lino
Para que entre dentro de la categoría de los ‘clásicos básicos atemporales’, la camisa de lino tiene que cumplir una serie de requisitos. Tiene que ser lisa, sin estampados, sin apliques. De color neutro, marfil, beige o la eterna azul que sienta bien a todo el mundo. De líneas sencillas y minimalistas, fácil de combinar.
Esta camisa, de Boglioli (320 €) está hecha en Italia en tejido de lino en azul claro. Acabado con cuello mao alto y puños redondos con tapetas laterales, es perfecta para looks casuales con un toque chic.
Aún más clásica y atemporal es la camisa con cuello americano, que es el que se caracteriza por llevar botones en los extremos, como esta de camisa de T.M. Lewin (200 €) en color azul marino. La firma detalla que está confeccionada con una mezcla de lino y modal natural en su prestigiosa fábrica italiana Tessitura Monti y es muy agradable de llevar hasta en lo días más calurosos.
Bermudas
La bermuda es el protagonista del mejor streetstyle de todos los veranos. La más clásica y atemporal es la que va ligeramente por encima de la rodilla, es de corte recto y en colores neutros para que pueda ser combinada con calzado, camisas o polos de todo tipo y color.
El color marfil siempre es un gran aliado. La que os proponemos es de Aspei y es de algodón (240 €). Su diseño cumple los requisitos de la atemporalidad, lleva bolsillos americanos delante y con ribete en los de atrás. El corte es recto pero ajustado.
Polo blanco
Esta prenda nació oficialmente en los años 20 de la mano del francés René Lacoste. Blanca, de manga corta, de algodón, holgada, con un cuello plano, abotonada y un poco más larga en la parte trasera. Fue un diseño que creó para jugar al tenis pero traspasó la cancha. Desde entonces, es la prenda todo terreno por excelencia. Queda bien con todo y son aptos para prácticamente todas las ocasiones.
Con un estilo vintage a la par que moderno, este polo de Orlebar Brown (145€) de tela toalla destaca por los detalles cuidados. El tejido es increíblemente suave y la tapeta abierta mantiene la frescura.
Náuticos
El zapato náutico se utilizaba originalmente, como su nombre indica, para los deportes acuáticos. Su estructura mezcla la piel con suelas de goma, imprescindible para no resbalarse en la cubierta, y están rematados con un cordón de cuereo que recorre todo el zapato. Con los años se empezó a utilizar fuera del barco y hoy en día, todos los veranos, las marcas de calzado más exclusivas siempre lanzan algún modelo nuevo.
Santoni reinterpreta el clásico náutico (foto de arriba) con una elegante parte superior de cuero pulido a mano. Tiene un precio de 480 €.
El náutico sobre estas líneas es de un color más atrevido, aunque mantiene el estilo clásico de Sebago. Tiene un precio de 167€. El modelo Timberland tampoco podía faltar.
Gafas clásicas
Uno de los complementos básicos clásicos del verano son las gafas de sol de estilo aviador. Raro es a quien no le quedan bien. Ray-Ban fue quien las diseño en 1937 para los pilotos de aviación de EE.UU., y a día de hoy no hay marca que no tenga su propio modelo Aviator.
El modelo Benedict de Oliver Peoples (375 €) lleva doble puente con lentes en color verrde y montura dorada.
