Hace poco hablábamos de que el magnate de las redes sociales, Mark Zuckerberg, estaba construyéndose un búnker en una isla de Hawái que, además, era propiedad suya desde hace un par de años. Esto lo hizo con el objetivo de poder vivir en un lugar apartado. Al parecer, al fundador de Amazon y uno de los hombres más ricos del mundo, Jeff Bezos, también le ha gustado la idea y ha adquirido una nueva propiedad en Miami, en la isla denominada búnker de los millonarios.
Sobre esta zona exclusiva, Bezos ha decidido añadir una nueva propiedad a su colección, puesto que ya tiene otras dos casas en la misma zona. El magnate planea vivir en este espacio y derribar las otras dos casas con las que cuenta. Esta nueva mansión fue construida en 1956 y ampliada en los años 1986 y 2014. Fue uno de los negocios más rentables del exbanquero Javier Holtz y teniente de alcalde de la isla, que se hizo con ella en 1998 por un precio de 2,5 millones.
La residencia, de más de 2.000 metros cuadrados, se encuentra en una parcela de 1,1 hectárea. Tiene dos plantas con seis habitaciones y nueve baños, además de una gran piscina en el jardín trasero, una amplia entrada con vegetación e incluso un embarcadero. Esta isla, Indian Creek Island, no es una isla natural, sino el fruto de una operación de Bascayne Bay a principios del siglo XX como parte de un proyecto para construir una isla más grande que finalmente no se pudo llevar a cabo. Por eso, se convirtió en un conjunto residencial rodeado por un campo de golf diseñado por William Flynn.
Actualmente, sólo tiene 41 parcelas ocupadas y sus residentes son de lo más exclusivos, puesto que los vecinos de Jeff Bezos serán grandes rostros conocidos como Beyoncé, Tom Brady o Adriana Lima.
La zona sólo cuenta con un puente de acceso y la seguridad está más que garantizada. Para poder entrar, debes pasar un control que está supervisado por la policía y formado por 13 trabajadores que están presentes las 24 horas del día, así como una patrulla marina extra, por si alguien intenta entrar por alguno de los embarcaderos. Además, el acceso a todo aquel que no sea residente será denegado.
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Está claro que a Jeff Bezos le gusta lo exclusivo y que no le importa gastarse grandes cantidades en sus residencias, puesto que, al fin y al cabo, son una inversión. Por esta mansión, el magnate del retail online ha pagado 90 millones y se suma a la larga lista de propiedades que tiene en Estados Unidos. Cuatro en Miami, una en Beverly Hills por la que pagó 175 millones, ocho en Seattle valoradas en 200 millones, además de su residencia de Maui y la de Texas.
