Las últimas tendencias en decoración para lo que queda de 2020 se están centrando en aspectos más vinculados a la naturaleza. El confinamiento, que se produjo a consecuencia de la pandemia Covid-19, ha influido en la búsqueda de espacios más verdes y que permitan un mayor contacto con lo natural.
Se imponen el bienestar y la salud y las corrientes arquitectónicas van en este sentido. La certificación WELL, por ejemplo, está comenzando a estar en auge. Ésta, es un estándar que se basa en el establecimiento de medidas dirigidas a primar la salud física y emocional a la hora de construir edificios o casas y decorar sus interiores.
Sostenibilidad
Hay una palabra que marca el recorrido actual de nuestra vida, y por tanto, de la decoración en los hogares: la sostenibilidad. Por ello, últimamente se está apostando por los materiales naturales y de origen orgánico: madera, ladrillo, arcilla, algodón, mimbre, arena de playa, bambú…
En colores
La gama cromática surge en colores crudos, ocres, tierra, sepias, marrón, arena o gris nube. El color blanco, con diferentes matices, también es el protagonista de espacios de inspiración mediterránea y nórdica. A su vez destacan espacios de colorido explosivo, que rompen la serenidad cromática con mezclas en apariencia imposibles, a base de estampados geométricos con diseños de evocación selvática.
Piedra y otros materiales
Como viene siendo una constante en los últimos años, la piedra está presente en numerosas estancias: caliza, pizarra, mármol o alabastro revisten paredes y suelos, y conviven en armonía con materiales sinterizados, porcelánicos, cerámicos o laminados.
Piezas de anticuario
Se imponen exquisitas piezas de anticuario en forma de lámparas de cristal, cómodas y curiosos objetos de coleccionista. Así, las obras de arte, salpican las estancias enriqueciendo las propuestas decorativas.
Ver esta publicación en Instagram
Global Style
Según Casa Decor, como una de la últimas tendencias en decoración en interiores se impone un estilo “global style”. Vemos, sobre todo, guiños tribales, aires selváticos y piezas de culturas vernaculares, en especial, la africana.
Sistemas domóticos
En el interior se imponen sofisticados sistemas eléctricos y domóticos, que cuidan al detalle la iluminación creando diferentes escenas para distintas horas del día. Todo ello en pro de la confortabilidad y la eficiencia energética de los edificios.
Ver esta publicación en Instagram
Rústico y natural
Cada una de estas propuestas se mezcla con la belleza límpida de las casas mediterráneas, con paredes encaladas, objetos de barro y muebles de madera. Existe un claro gusto por todo lo rústico y natural, dando valor a objetos simples y sencillos, como una sartén, una cesta, un botijo o las cerámicas de la cocina.
