Desde los orígenes del antiguo Egipto, el concepto de la decoración de interiores ha ido in crescendo. Presumidos y con el objetivo de demostrar su poder a través de la ostentación, los grandes faraones y figuras de referencia decoraban el interior de sus palacios al milímetro. La cultura del antiguo Egipto no solo fue pionera en ciencias y arquitectura, sino que también desarrolló una decoración suntuosa pensada para la vida eterna. Sus muebles podían tener una estructura simple, pero rebosaban elementos decorativos y eran llamativos gracias a sus colores intensos obtenidos de pigmentos minerales.
Su gran esplendor llegó con el Renacimiento italiano, cuando los aristócratas de la época contrataban a los mejores artistas para recrear pinturas personalizadas en sus hogares y convertirlos en una auténtica obra de arte. Convertidos en diseñadores, esos artistas dieron rienda suelta a su creatividad aportando ideas nuevas a la decoración, un punto de inflexión que supuso el comienzo del interiorismo moderno. Con el paso del tiempo, los monarcas y nobles también comenzaron a dedicar más tiempo a decorar sus palacios, contando con profesionales del campo. Según sus gustos, surgieron estilos como Tudor, imperio, Luis XV o victoriano que aún hoy siguen inspirando a diseñadores de interiores.
- Así entienden el ‘Workation’ en Puente Romano
- Francis Sultana, el diseñador que fusiona lo funcional con el arte
No es hasta comienzos del siglo XX cuando se acuña el término decorador o diseñador de interiores, con la creación, en 1923, de la primera compañía de diseño de interiores en Estados Unidos –Dorothy Draper & Company– algo que hasta ese momento no se conocía. A partir de ahí, la labor se comenzó a popularizar hasta el día de hoy, que es una labor a la que se considera todo un arte. Hoy en día la profesión se encuentra compuesta por miles de profesionales y todos ellos pelean por entrar en una élite donde se desarrollan los trabajos más expresivos basándose en las tendencias globales. Uno de esos reconocidos nombres es el del británico Martin Waller, fundador de Andrew Martin, también llamado ‘el Indiana Jones del diseño de interiores’.
Desde 1978, este diseñador cuenta con influencias eclécticas de alrededor del mundo, creando conexiones con otras culturas, tiempos y lugares mediante la fusión de los interiores, por ello y esas aventuras que destacan en su trabajo se le denomina como el ‘Indiana Jones’ del diseño . El fin es el de encontrar un resultado estético, intrépido y emocional. Su objetivo es el de combinar estilos manteniendo la elegancia, el confort, así como una sensación de escapismo para el día a día. Sus diseños aportan luz sobre culturas ocultas, brindando escenarios para el descubrimiento y la recreación, a través de hallazgos únicos, con un toque que fusiona historias y funciona como un caleidoscopio de costumbres y artesanías.
Sus obras han tenido lugar por todo el globo y a continuación, desgranamos las cinco elecciones que el creador destaca.
Hotel Boutique Lodge Sky & Spa
Un lugar donde el estilo nórdico predomina en el interior y exterior. Las habitaciones se visten con el cuero mientras se combina con tonalidades oscuras, detalles como un poster estilo retro y muebles que evocan a ese estilo acogedor del refugio de lujo perfecto, pensado para ser disfrutado en pareja o en familia. La madera finlandesa reviste sus espacios, creando una estética cálida y elegante, que mantiene un ambiente caluroso en cada estancia, apostando siempre por la sostenibilidad del espacio.
Hotel Puente Romano Resort
El objetivo de Martin era decorar este espacio frente al mar como si de un súperyate se tratara, llevando a cabo un cuidado diseño frente al mar que creara una estética relajada. Los suelos fluyen desde el interior al exterior, con cristaleras de vidrio que permiten una mirada plena al mar y muebles acabados en madera, que hacen eco a las palmeras del exterior. Los muebles beben de un estilo francés, salpicado con colores relajados que bailan con el mar como telón de fondo. Papeles pintados, con toques rústicos y mobiliario de carácter industrial que crean un aspecto sencillo.
The George Hotel London
Ubicado en la idílica Isla de Wight, este espacio respira un estilo británico del siglo XVII, modernizado, combinando los colores cálidos de las maderas en doseles o mobiliario auxiliar, abrazado por tonalidades claras vistiendo las paredes. Habitaciones con personalidad propia que crean una burbuja boutique de descanso. Toda una misión de crear un espacio hogareño dentro de un pequeño hotel frente a la costa de la isla.
XTX Markets
Con una inspiración industrial, esta FinTech británica quería mezclar la comodidad con la innovación, para dar lugar a un espacio de trabajo que evoque al hogar. Con una réplica del Apolo 11, que puede verse como un pequeño espacio de trabajo o de reunión, se aúna con amplios espacios comunes, lo que permite una gran entrada de luz con el objetivo de recrear espacios de trabajo allá donde mires.
Starpowa Brand
Marca británica líder en vitaminas, el objetivo del estudio era desarrollar un espacio que respirara frescura, diversión, color y emoción, esencia también de la marca británica. Combinado con colores neutros en las paredes y suelos, creando espacios abiertos a través de cristaleras, el color llega en el mobiliario con tonalidades en flúor, entremezclada con colores suaves, que pueden evocar al estilo hindú en su bordado, en rosas y naranjas.
Muchos piensan que decorar es solamente tener gusto y colocar varios muebles juntos. No solo es decorar, es crear un espacio, es psicología, es aunar elementos para que un lugar presente comodidad, calidez y disfrute visual.