¿A ti también te sucede? Quizá no te des cuenta, o lo hayas observado en otras personas pero no en ti mismo, pero es mucho más común de lo que pensamos. Estamos hablando de un impulso del subconsciente, una de esas situaciones que suceden sin que seamos conscientes de ella, pero que a lo mejor sí has visto en los demás: caminar de un lado para otro mientras hablamos por teléfono.
Antiguamente era menos habitual, pero con el auge de la telefonía móvil empezamos a ver pautas de comportamiento un tanto extrañas, como mirar el móvil continuamente aunque no haya sonado, atender los mensajes siempre en el mismo momento en que llegan, consultar el teléfono en la cama aunque nos muramos de sueño, o la que nos ocupa en este artículo: caminar inconscientemente mientras hablamos con otra persona que está a kilómetros de distancia.
¿Cuál es el significado de no poder estar quietos mientras hablamos por teléfono, desde la psicología?
Es curiosa la incapacidad que tienen algunas personas para, simplemente, sentarse en una silla o en el sofá de casa mientras atienden una llamada. Cuando se tiene que hablar en la calle este comportamiento puede tener una explicación lógica, pero cuando sucede incluso dentro del hogar la verdad es que resulta difícil explicarlo.
Y no, no tiene explicación. En la amplía mayoría de casos, la persona que lo hace no es consciente de ello: es un acto del subconsciente y responde a patrones de personalidad muy definidos. Sus interpretaciones y significados desde el punto de vista de la psicología son muy variados, pero se pueden resumir en las siguientes líneas:
- Inquietud o ansiedad: Muchas personas tienden a moverse cuando están nerviosas o ansiosas. Hablar por teléfono, especialmente si se trata de una conversación importante, puede generar tensión que se manifiesta a través del movimiento físico, y esto es justo lo que les sucede a estas personas. Se sienten tensionadas ante cualquier conversación, aunque sea con un familiar cercano.
- Estilo de comunicación: Algunas personas son más activas físicamente y utilizan el movimiento como una forma de expresar su energía y emociones. Este comportamiento puede ser parte de su estilo de comunicación natural, y lo ponen de manifiesto continuamente (también cuando hablan por el móvil y no les ve nadie).
- Concentración: Moverse mientras se habla puede ayudar a algunas personas a concentrarse mejor. Lo ejecutan como acto reflejo, pero con un propósito subyacente. El movimiento de un lado a otro puede estimular la mente y facilitar la fluidez del pensamiento.
- Personalidad activa: Las personas con una personalidad más activa o inquieta suelen estar en constante movimiento, aunque no lo necesiten. Este rasgo puede ser un reflejo de que necesitan estimulación y dinamismo constante en su vida diaria. Lo manifiestan incluso aunque tengan que caminar diez o doce metros por el pasillo de su vivienda mientras atienden el teléfono.
- Respuesta al aburrimiento: En algunos casos, el movimiento puede ser una respuesta a un estímulo que se percibe como aburrido. Por ejemplo, si estamos envueltos en una conversación desagradable o que queremos que termine pronto, caminar de un lado a otro puede ayudarnos a sobrellevar la espera.
- Gesticulación: Algunas personas tienden a gesticular mucho al hablar, incluso por teléfono, lo que puede ser una extensión de su forma natural de comunicarse y de expresar sus pensamientos. Este tipo de personas también son más propensas a caminar con el teléfono en la oreja sin darse cuenta de ello.