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La forma en que los demás nos perciben no depende sólo de lo que decimos o cómo nos movemos. De hecho, más allá de los test de personalidad, hay formas mucho más naturales de causar una determinada impresión. Por ejemplo, con el olor corporal.
Por increíble que parezca, una investigación realizada por la Universidad de Victoria y publicada en Evolution and Human Behaviour ha vinculado el olor corporal masculino, los niveles de testosterona y la forma en la que el resto interpreta el estatus social.
Es decir, ciertos aromas humanos influyen en la percepción de la dominancia, por lo que algunas personas tienden a asociar determinados olores con una posición de poder, incluso sin ser conscientes de ello.
Este olor corporal hace que te perciban como una personalidad dominante, según la ciencia
Los seres humanos utilizan múltiples vías para comunicar su posición dentro de un grupo: el tono de voz, la postura, los gestos o la forma de vestir. Sin embargo, el olfato también juega su papel y no siempre es tenido en cuenta.
Los investigadores analizaron si los olores corporales vinculados a niveles de testosterona afectan a los juicios que hacemos sobre el estatus social de los demás.
De acuerdo con los resultados, tanto hombres como mujeres percibieron a los hombres con niveles más altos de testosterona como más dominantes que a aquellos con niveles más bajos.
Las conclusiones del estudio científico fueron muy claras: «Encontramos que tanto los participantes hombres como mujeres de nuestro estudio percibieron a los hombres con niveles más altos de testosterona como más dominantes que a los hombres con niveles más bajos de testosterona».
Eso sí, este resultado no se relacionó con que el olor fuera más agradable, más intenso o más atractivo, sino exclusivamente con la percepción de dominancia.
En cambio, no se encontró ninguna relación significativa entre los niveles de testosterona y la percepción de prestigio, que es la otra gran vía por la que los humanos construyen estatus social.
Para llevar a cabo la investigación, se reclutó a 76 estudiantes varones que proporcionaron muestras de saliva con el fin de medir sus niveles de testosterona.
Además, estos participantes usaron camisetas durante un período controlado, destinadas a recoger su olor corporal bajo condiciones específicas.
Esas camisetas fueron luego presentadas a un grupo formado por 797 personas, hombres y mujeres, que no conocían a los donantes.
Estos participantes actuaron como evaluadores del olor, y valoraron cada muestra en función de varios criterios: percepción de dominancia, percepción de prestigio, intensidad del olor, grado de agrado y atractivo.
Los resultados fueron consistentes: las camisetas pertenecientes a hombres con niveles más altos de testosterona fueron asociadas con mayor dominancia.
Esta relación se mantuvo incluso cuando los investigadores controlaron posibles factores de confusión, como la intensidad del olor, la valoración positiva del aroma, la etnia del donante, la percepción que este tenía sobre sí mismo o el sexo de quien evaluaba el olor.
El papel del olfato en la comunicación humana, según los científicos
Dicen que cada persona tiene una huella olfativa, por lo que la comunicación química en humanos necesitaba un estudio más amplio.
Por ejemplo, en el mundo animal, el uso del olor para marcar territorio o expresar dominancia es algo habitual. Por ejemplo, en especies como los ratones, el marcaje olfativo es una forma directa de imponer jerarquía.
Gracias a estos detalles una conclusión del estudio es que, en los humanos, el fenómeno opera de manera más sutil, pero no por ello menos relevante. En este caso se ha probado que el olor corporal también transmite información social.