¿Qué es la vitamina C y para qué sirve?

vitamina C

La vitamina C es uno de los nutrientes más reconocidos y asociados con el aumento de las defensas del organismo. De hecho, la Revista Española de Nutrición Humana y Dietética señala 6 beneficios esenciales asociados al fortalecimiento del sistema inmunológico. 

Ahora bien, esta vitamina hidrosoluble participa en la formación de músculos y el colágeno. Además, es indispensable en la nutrición infantil. Sus beneficios son muy amplios y no solo se concentran en el sistema inmune.

En esta entrada abordaremos todo lo relacionado con esta vitamina de gran poder antioxidante, pero empecemos por definirla.

¿Qué es la vitamina C?

La vitamina C, también conocida como ácido ascórbico/antiescorbútica, es un nutriente esencial para nuestro cuerpo, de hecho, incide en el crecimiento y desarrollo normal.

Esta vitamina no puede producirse por sí mismo, por lo que debes obtenerlo a través de la dieta en alimentos como las frutas cítricas, fresas, kiwi, pimientos, brócoli, espinacas, o la suplementación.  

¿Para qué sirve la vitamina C? Todas las funciones

La vitamina C juega un papel fundamental en una amplia gama de procesos biológicos, por lo que podemos destacar que sus funciones más importantes son:

Deficiencia de vitamina C

Un bajo consumo de este nutriente esencial puede causar problemas de salud que incluyen:

Beneficios de la vitamina C para la salud

El  ácido ascórbico actúa como un poderoso antioxidante, esto significa que combate los radicales libres, agentes responsables del envejecimiento prematuro. 

Además, según un artículo publicado en la Revista MedlinePlus, la “suplementación de vitamina C ayuda a prevenir y tratar el escorbuto”; una enfermedad que se desarrolla por la deficiencia de este nutriente.

A continuación, señalaremos algunos de los beneficios más destacados de esta importante y popular vitamina.

Protección contra el daño celular

La vitamina C es un potente antioxidante que ayuda a proteger las células del daño causado por los radicales libres.  Estos radicales son moléculas inestables que pueden dañar el ADN, las proteínas y las membranas celulares, contribuyendo al envejecimiento prematuro y al desarrollo de enfermedades crónicas como enfermedades cardíacas, cáncer y Alzheimer. 

Según cierta investigación, la vitamina C neutraliza estos radicales, previniendo el daño celular y protegiendo la salud a largo plazo. De hecho, la información destaca que el  ácido ascórbico “actúa como la primera defensa contra los radicales libres en la sangre completa y en el plasma. Junto con la vitamina E y los betacarotenos cumplen la función de antioxidantes tanto de una manera individual como también cooperativamente”.

Sistema Inmunitario Reforzado

Este nutriente estimula la producción de glóbulos blancos; las células responsables de combatir las infecciones,  y aumenta la actividad de las células NK (Natural Killer), las cuales ayudan a eliminar células infectadas o cancerosas, así lo indica un artículo publicado en la Revista Española de Nutrición Humana y Dietética.

Consumir suficiente vitamina C puede ayudar a reforzar nuestras defensas naturales y a prevenir enfermedades.

Estimula la Producción de Colágeno

Ayuda a lograr una piel radiante y saludable, debido a que participa en la producción de colágeno, una proteína que proporciona estructura y soporte a la piel, los tendones, los ligamentos y los vasos sanguíneos. 

Según un artículo publicado en el Elsevier, el colágeno es responsable de la elasticidad y firmeza de la piel. 

La deficiencia de vitamina C puede conducir a una piel seca, áspera y con arrugas prematuras.  

Ayuda absorber el hierro

Mejora la absorción de hierro de origen vegetal,  lo que es especialmente importante para las personas que siguen una dieta vegetariana o vegana, pues el hierro de origen vegetal se absorbe con menor facilidad que el hierro de origen animal. 

El hierro estimula la producción de hemoglobina, esencial en el transporte del oxígeno de los pulmones a distintas partes del cuerpo, así lo indica una publicación del NIH.

Precauciones y contraindicaciones del uso de vitamina C

Este nutriente es esencial, sin embargo, es conveniente tomar en cuenta algunas precauciones en su consumo:

Es muy raro presentar una “sobredosis” de este nutriente, ya que no se almacena en el organismo. Sin embargo, es necesario seguir las recomendaciones del consumo diario para prevenir una deficiencia del mismo.

Bibliografía

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