Aunque pueda no sonarte su nombre, ya hemos hablado alguna vez de la eficacia de los ejercicios pliométricos. Descubrir la pliometría si eres deportista puede ser muy beneficioso para ti, pues se trata de una técnica pensada para personas que necesiten trabajar y fortalecer de forma funcional músculos, tendones y ligamentos. Y, seamos francos, todos lo necesitamos. A lo largo de este artículo te contamos qué son los ejercicios pliométricos y te explicamos por qué necesitas llevarlos a cabo como preentrenamiento.
Los ejercicios pliométricos
Se consideran ejercicios pliométricos todos aquellos que utilizan el reflejo miotático de estiramiento para producir una respuesta más fuerte de contracción muscular. Esto lo conseguimos con movimientos rápidos y potentes que involucran el preestiramiento del músculo. Pero, ¿cuáles son estos ejercicios?
Quizás creas que no has puesto en práctica estos ejercicios nunca pero seguro que sí estás más familiarizado con movimientos como por ejemplo el que se hace con los brazos al hacer un saque en fútbol o los que se requieren al hacer flexiones con banca. Todos ellos requieren fuerza de brazos y piernas e implican en un momento u otro un ejercicio de flexión.
Puesto que son ejercicios laboriosos y de impacto, no se recomienda su práctica más de tres veces por semana y, si nos encontramos en temporada deportiva de competición, el máximo recomendado disminuye a dos.
¿Qué tener en cuenta antes de hacer estos ejercicios?
Hay diversas cosas que debemos tener en cuenta antes de iniciar un programa basado en ejercicios pliométricos. Lo más recomendable es someterse previamente a una evaluación biomecánica, un test de estabilidad y un test de movimiento dinámico.
El primer test determina la habilidad individual de estabilizar y controlar el cuerpo. El segundo evalúa la habilidad del deportista para realizar movimientos explosivos y coordinados cómo por ejemplo saltos verticales o saltos largos en una pierna. Además de esas pruebas, es también bueno definir y cumplir factores cómo el tiempo de recuperación del atleta, la intensidad, el volumen, la velocidad de ejecución del ejercicio o si se agregará carga externa a la práctica. El peso del atleta o la edad son también importantes, pues cuanto más pesado sea el atleta, mayor debe ser la demanda de entrenamiento pero a edades tempranas la intensidad del ejercicio debería ser más baja.
Por medio del siguiente vídeo puedes ver algún ejemplo de ejercicios pliométricos y practicar en casa. Pero recuerda que siempre es mejor que partas del conocimiento de tus capacidades y que antes de hacer cualquier actividad física cuentes con la valoración de un profesional.
