La Navidad es época de disfrutar, pero tampoco hemos de perder la cabeza. Después del verano, hemos estado mucho tiempo preparando nuestro cuerpo, primero perdiendo los excesos que hemos arrastrado del verano y, después, preparándonos para lo que viene en la época festiva. Compromisos sociales, comidas, cenas… Son muchos los momentos en los que los excesos van a estar de vuelta. Pero es verdad que tampoco nos queremos privar de nada. ¿Qué pasa con los momentos idílicos en casa? Lluvia, nieve, manta, hacer maratones con películas de Navidad y degustar algo que nos haga saborear ese instante. Hoy hacemos una receta sin remordimientos: chocolate a la taza, versión healthy.
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Muchos tienen su bebida favorita de Navidad, pero sabemos que esta es la que nunca falla. Sentarse en el sofá con una taza de este manjar dulce, humeante, mientras las luces iluminan cada esquina de la casa y estás viendo Solo en Casa 2, es un momento incomparable. Pero lo sabemos, somos conscientes de que, a veces, ya hemos cometido varios excesos y este lo queremos llevar a cabo, pero si es de una manera más sana, mejor. Te explicamos cómo lo puedes hacer y sin remordimientos.
Comenzamos con los ingredientes
- 250 ml de leche desnatada.
- 1 huevo.
- Dos cucharadas y media de cacao en polvo desgrasado y sin azúcares añadidos (16 gramos aproximadamente).
- Edulcorante líquido o natural (10 gramos).
- Una pizca de canela molida.
Así es como lo preparamos:
Calentar la leche y añadir huevo
Enciende la vitrocerámica y ponla al número cinco, más o menos. El motivo de esto es porque, por un lado, si la leche se calienta mucho, se puede cortar e incluso llega a perder todos los beneficios que tiene. Lo ideal es que se caliente poco a poco y no suba de un límite que termine resultando amarga. Después le echamos el huevo y batimos con unas varillas, para que se integre bien.
Se añade el cacao
Este es un momento al que hay que prestar atención, puesto que no queremos que se queden grumos. Para que no suceda, en vez de echar las dos cucharadas y media de golpe, lo podemos espolvorear con un tamizador y que así, según caiga, se vaya incorporando de una manera natural. Es importante que, según se esté haciendo, se siga removiendo. Una vez realizado el paso, se añade la canela y se sigue trabajando con las varillas, hasta que todo quede aunado y vaya espesando nuestro chocolate healthy.
No dejar que hierva
Mientras se hace el proceso, es muy importante que el fuego no esté alto, como bien hemos mencionado. Lo tenemos que mantener de manera constante y vigilarlo, porque ahí está la clave. Si se sube de temperatura más de lo normal, se puede llevar a quemar y ese sabor se queda en el trasfondo de la receta y es algo que no suele gustar.
Servir en la taza de Navidad perfecta
Para terminar de disfrutar esta receta de chocolate healthy, es importante escoger una de nuestras tazas navideñas ideales. Para terminar, puedes añadirle un poco más de canela, al gusto, para que le termine de dar el toque perfecto.
