Imagina un pequeño gesto nocturno tan sencillo como delicioso que podría marcar la diferencia entre dar vueltas en la cama y dormir como un tronco. En otoño, una fruta de toda la vida se convierte en tu aliada para bajar los niveles de estrés, específicamente la hormona cortisol, y favorecer un sueño de calidad. Comerla antes de acostarte no es sólo un capricho saludable, sino un truco respaldado por estudios que podrías incorporar fácilmente a tu rutina. Si quieres saber cuál es este aliado natural para dormir mejor, aquí va la revelación: se trata del kiwi.
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Cuando pensamos en frutas que refuerzan el sistema inmunológico o que aportan fibra y vitaminas, probablemente no imaginamos que puedan tener un papel tan directo sobre nuestro descanso y ansiedad. Pero resulta que kiwi, fruto estrella del otoño-invierno, está ganando protagonismo por su doble efecto: combate del estrés y mejora del sueño. Según fuentes especializadas, consumir kiwi justo antes de acostarse puede transformar tu noche, ayudándote no sólo a conciliar el sueño con mayor facilidad sino también a despertar con sensación de recuperación.

¿Por qué el kiwi actúa sobre el cortisol y el sueño?
El cortisol es una hormona relacionada con el estrés; niveles elevados por la noche pueden interferir con nuestra capacidad para dormir bien. Se ha observado que consumir kiwi por la noche puede contribuir a reducir dichos niveles.
Además, este fruto contiene compuestos que favorecen los procesos naturales del sueño: posee melatonina y serotonina, sustancias que intervienen en la regulación del ciclo sueño-vigilia.
En estudios realizados, grupos de personas que comieron dos kiwis antes de acostarse experimentaron mejoras:
- Reducción del tiempo que tardaban en dormirse
- Aumento de la duración del sueño
- Sensación subjetiva de haber descansado mejor
- Disminución del estrés/restricción del impacto del esfuerzo físico sobre el descanso en participantes sometidos a alta carga de actividad

Cómo incorporarlo en tu rutina nocturna
Para aprovechar los beneficios del kiwi sobre el cortisol y el sueño, no basta con consumirlo aleatoriamente. Algunos consejos para incorporarlo de forma efectiva:
- Consume dos kiwis una hora antes de acostarte, tal como lo hicieron los sujetos en estudios que evaluaron sus efectos sobre el sueño.
- Asegúrate de que estén frescos y maduros, para maximizar sus nutrientes y compuestos activos.
- Complementa este hábito con buena higiene del sueño: un ambiente tranquilo, evitar pantallas antes de dormir, tener una temperatura adecuada, etc.
- Mantén una alimentación equilibrada durante el resto del día. Este fruto puede ayudar, pero no sustituye otros hábitos saludables.

Beneficios adicionales más allá del sueño
El kiwi no sólo contribuye a un mejor descanso: también es una excelente fuente de vitamina C y vitamina K, lo que ayuda a fortalecer el sistema inmunitario y apoyar la salud ósea. Además, su contenido en fibra favorece la digestión y puede actuar como saciante, lo cual lo convierte en una opción saludable incluso si se consume por la noche.
