Autóctona del Mediterráneo, la caléndula es una planta herbácea usada habitualmente en productos de tratamiento y herbolario. El nombre de esta planta perenne deriva del latín ‘kalendae’, que significa ‘pequeño calendario’ o ‘el primer día de cada mes’ y florece a principios de mes. También se la conoce como ‘maravilla silvestre’ o ‘flor de muerto’. Lo que no todo el mundo sabe es que además posee numerosas e importantes propiedades curativas y de conservación para nuestro organismo y para nuestra piel. Ha sido una hierba apreciada durante muchos siglos y sus ingredientes se han usado tradicionalmente en la medicina ayurvédica y en la medicina tradicional china. Los pétalos de caléndula se suelen emplear para calmar la piel, contribuyen a reducir los signos del envejecimiento y ayudan a lucir una piel tersa, radiante y fresca, y mucho más. Hoy te contamos todo sobre las propiedades y beneficios de la caléndula para la piel.
En la Antigüedad, la caléndula se empleaba para todo tipo de remedios caseros: desde curar una herida abierta hasta una picadura o tratar las pieles irritadas. Dentro de la cosmética natural, esta planta es conocida por ser, junto a la bardana y el aloe vera, uno de los elementos vegetales más eficaces para cuidar la piel.
Las flores de la caléndula son de color anaranjado o dorado con un aroma fresco e intenso y se caracteriza por florecer durante todo el año, incluso en inviernos no demasiado fríos. Los pétalos son conocidos por ayudar a calmar la piel y el aceite se considera hierba medicinal desde hace muchos siglos.
En la Edad Media, este ingrediente se empleaban para dar color a los quesos y la mantequilla. Durante la Guerra Civil de Estados Unidos y la I Guerra Mundial, los pétalos se usaban para cubrir heridas. En la cultura hindú, este vegetal se usa para adornar estatuas y se suele incorporar en la cocina, los tejidos y los productos cosméticos. La caléndula se usaba en las antiguas civilizaciones Azteca y Maya y, actualmente, forma parte de las procesiones del Día de los Muertos en México
Cada pétalo de este vegetal contiene diferentes propiedades eficaces para la piel: ácido oleánico, salicílico, málico, lupeol, quercetina, amirina, terpenoides, fitoesteroles, betacarotenos… Todos ellos sometidos a estudios y conocidos por proporcionar una protección antioxidante, además de calmar y reducir las molestias en la piel.
Los compuestos de la caléndula aportan múltiples beneficios:
- Calman y mejoran la piel de forma visible: su riqueza en principios amargos le brindan a esta planta medicinal un gran efecto antiflogístico, antiinflamatorio y antiséptico. Estas propiedades también sirven para el tratamiento de otros problemas cutáneos como las estrías, las manchas en la piel o las cicatrices.
- Contribuyen a reducir los signos del envejecimiento.
- Remedio naturales para tratar afecciones en pieles sensibles: la caléndula tiene maravillosas propiedades suavizantes, calmantes y emolientes que permiten aliviar y reducir irritaciones, rojeces y descamaciones.
- Potente efecto hidratante: esta planta cuenta con una riqueza en diferentes ácidos grasos, lo cual le brinda excelentes propiedades humectantes.
Además de los productos de tratamiento con aceite de caléndula, esta hierba comestible se suele usar en la cocina y en infusiones. Los pétalos de esta planta se pueden mezclar con ensaladas, infusionar para conseguir una infusión relajante o utilizar como sustituto del azafrán. De la flor también se puede obtener colorante amarillo que se usa para teñir tejidos y alimentos.