El matrimonio de Rolex con el deporte se forjó hace ya varias décadas, y desde entonces, nos han demostrado que estas dos industrias comparten precisión, disciplina y vanguardia en todo lo que hacen. Todo comenzó en 1927, cuando la nadadora inglesa Mercedes Gleitze atravesó el Canal de la Mancha con un Rolex Oyster. Tras 10 horas de travesía, el reloj seguía funcionando. Rolex anunció entonces en la primera plana del diario Daily Mail la proeza con una foto de la nadadora. Así nació una larga tradición de patrocinios deportivos que se fueron intensificando con el paso de los años.
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Rolex y el tenis
Garante del futuro del tenis durante más de 40 años, Rolex se asoció con Wimbledon por primera vez en 1978, momento en el que el tenis experimentaba una poderosa transformación.
Los últimos años de la década de 1970 marcaron el inicio de la edad de oro del tenis profesional: el atractivo de las grandes competiciones aumentaba, el deporte adquiría un alcance global y las figuras principales del juego empezaban a cautivar a espectadores de todo el mundo. La edición de Wimbledon de 1978 sentó las bases del torneo para las próximas décadas.
Actualmente, Rolex sigue muy unido con este deporte y patrocina los cuatro torneos del Grand Slam, los principales eventos del tenis masculino y femenino y las competiciones por equipos más importantes del mundo.
Rolex y el golf
Rolex lleva más de 50 años involucrado en el mundo del golf. Sus inicios se remontan a 1967 con su trascendental colaboración con Arnold Palmer.
Desde entonces no ha hecho más que crecer y florecer, extendiéndose a todos los niveles del deporte, apoyando por igual a los jugadores de élite y en desarrollo y colaborando con los principales circuitos profesionales y cuerpos directivos y con los eventos de mayor calidad del golf.
Rolex y el automovilismo
El estrecho vínculo de Rolex con el automovilismo y la velocidad se remonta a los años 30. Rolex colabora con las principales competiciones automovilísticas como Fórmula 1, así como con otros eventos clásicos impregnados de tradición y las carreras de resistencia más emblemáticas.
A comienzos de 2013, Rolex se convirtió en Patrocinador Mundial y en Reloj Oficial de Fórmula 1, la competición estrella del automovilismo.
Rolex y la vela
Rolex ha forjado una relación privilegiada con la vela gracias a la afinidad natural con este dinámico deporte y sus valores de larga tradición.
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Este vínculo único se remonta, hace más de medio siglo, a una destacada colaboración con el New York Yacht Club que determinó la implicación de Rolex en el deporte.
Hoy en día, Rolex tiene profundos lazos con los más prestigiosos clubs de vela, instituciones y regatas del mundo, compartiendo los mayores estándares de excelencia con los guardianes del excelente espíritu de la vela.
Rolex y la hípica
Rolex ha sido representante de la hípica durante más de 60 años y es considerado una figura destacada en este deporte, apoyando a los mejores jinetes, competiciones e instituciones.
Rolex Grand Slam of show jumping: se creó en 2013 y está compuesto por tres Majors ecuestres. Considerado como la prueba de salto ecuestre definitiva, el Rolex Grand Slam of Show Jumping premia al jinete que gana el Grand Prix de tres de las pruebas sucesivamente.
Royal Windsor horse show: se celebra cada año desde 1943 y el primer año de Rolex como patrocinador oficial fue en 2016.
