Madrid se viste de gala, un poco antes de dar paso a los trajes de chulapa. Hablamos de la alfombra roja que ha vestido el pistoletazo de salida de San Isidro de gala. Dejando looks memorables, pero también accesorios que debemos tener en el radar. Entre ellos, uno de los más destacados, que desata una de las tendencias en joyería, lo pudimos ver luciendo en el estilismo de Cayetana Rivera Martínez de Irujo. Analizamos su look para saber cómo acertar con los pendientes en cualquier evento.
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Mayo no es sólo una fecha importante en el calendario por albergar las fiestas patronales de Madrid. También lo es porque da comienzo la temporada BBC primaveral. Sí, hablamos de bodas, bautizos y comuniones, esos momentos en los que toda fuente de inspiración, es poca. Buscando dentro de los looks de la alfombra roja de la gala de presentación de la Feria de San Isidro, hubo un estilismo que llamó la atención, por el gusto para hacer de un complemento el protagonista del look.
Hablamos de Cayetana Rivera Martínez de Irujo y de cómo consiguió crear el perfecto equilibrio a través de los contrastes para hacer que sus maxi pendientes brillasen más que nunca. Y es que las tendencias de moda no solo se centran en la ropa o los colores, también en los complementos y en saber encontrar la fórmula para sacarles el máximo partido. Algo que nuestra elegida ha sabido hacer con creces.

Todos los aciertos de su elección
Aunque desconocemos la procedencia de sus pendientes, este elegante diseño presenta una estética escultórica, compuesto por diferentes esferas en degradado. Con acabado efecto espejo, bañado en oro. Unos pendientes elegantes, clásicos, que bien podríamos encasillar dentro de la Statement Jewelry, la joyería de impacto a la que recurrimos cuando queremos que esta tome todo el protagonismo.
Otro de los aspectos que llama su atención es, precisamente, su tamaño. Si bien no fue la única que apostó por los pendientes XXL. Victoria Federica, que ya se ha consolidado como un referente milenial de estilo, también eligió un diseño en blanco y negro de dos piezas. Otro estilo, eso sí, optando por las formas orgánicas y el contraste de colores. Pero dando por sentado que vuelven los tamaños aumentados en este tipo de accesorios.

Ahora bien, se trata de una pieza protagonista, que no combina con cualquier estilismo. De ahí que esta elección junto al vestido simétrico con un gran corte triangular en blanco y negro diesen la combinación perfecta. Dejando al vestido actuar como lienzo para unos pendientes con tanta complejidad arquitectónica.
Otro acierto del look fue el peinado. En estos casos, y para dejar que las joyas persigan el protagonismo con el que fueron diseñadas, el director creativo de Carrera y Carrera, Daniel Calvo, nos comentaba la influencia del peinado. «En estos casos, los recogidos sí que son una gran oportunidad para lucir piezas más llamativas, escultóricas o con un diseño sofisticado», subraya Calvo.
Pendientes dorados XXL
La clave de esta pieza es que se trata de pendientes muy visuales, con un aire de lujo moderno que recuerda al estilo de diseñadores como Elsa Peretti para Tiffany, Sophie Buhai, o incluso a piezas escultóricas de Bottega Veneta o Paula Mendoza Jewelry.
Una opción similar la encontramos en el modelo Awa de Isabel Marant. Esta vez, dando la vuelta a la caída en cascada pero dejando a las esferas configurar el equilibrio entre las diferentes piezas.

La versatilidad de estos modelos permite a su vez jugar con las texturas. De este modo, en piezas con menos hileras en caída, podemos encontrar la forma de crear volumen y protagonismo con piezas más sutiles. Ideales para estilos también monocromáticos.

Claro que si lo que buscamos es combinar estos con estampados, continuar con la tendencia maxi gold es posible a través de estilos que rocen más el minimalismo, dentro de lo que un pendiente XXL permite. Así, las opciones de eslabones o en formato bolas permite cohesionar ambos elementos sin tener que renunciar a ninguno de los dos.

La colección Bird’s Eye de Aristocrazy es amor a primera vista. Destaca por formas onduladas y volúmenes fluidos que transmiten ligereza. Los pendientes están elaborados en plata 925 rodiada o bañada en oro amarillo de 18K.

Más sofisticado, con siluetas más finas y líneas que denotan el homenaje a la modernidad de Buccellati encontramos el modelo Hawaii. Una pieza de los años 30 que en su momento surgió como la evidencia de la contemporaneidad de su creador y que, a día de hoy, mantiene su estilo atemporal y vanguardista.

Incluso optando por la misma caída pero dando paso a las cadenas, conseguiremos este efecto. Además, el hecho de perder volumen hace que también encontremos un estilo que cede el paso a peinados más desenfadados, como semirrecogidos o, incluso, el pelo suelto.
