Breitling honra al avión que, durante más de medio siglo, surcó el cielo y cambió la forma de viajar, el Boeing 747. La compañía dejará de fabricar esta emblemática aeronave, conocida ‘reina de los cielos’, que revolucionó la aviación comercial a finales de la década de los años 60, al hacer los vuelos intercontinentales más rápidos y asequibles. Los colores de la edición limitada de Navitimer Boeing 747 se inspiran en la paleta del avión, el caseback abierto contiene los grabados especiales ‘One of 747’ y la frase ‘The Original Jumbo Jet’ (uno de 747 y el original Jumbo Jet). De este exclusivo reloj para aviadores solo se fabricarán 747 unidades.
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Navitimer, el cronógrafo de los pilotos
Breitling ha tomado su icónico cronógrafo para pilotos, el Navitimer, y lo ha personalizado inspirándose en el avión que en 1969 realizó su primer viaje. Presenta una regla de cálculo circular que permite a los pilotos realizar todos los cálculos de vuelo
Tomando los colores originales del avión, la esfera del reloj para aviadores es de color crema con esferas internas negras y la regla interior de cálculo en rojo.
El fondo de la caja permite observar el Calibre 01. Este movimiento ofrece una reserva de marcha de unas 70 horas y cuenta con una garantía de cinco años.
El reloj pensado originalmente para aviadores, está disponible con correa de piel de cocodrilo (negra o marrón), o con brazalete de metal de siete eslabones.
Un reloj con historia
El Navitimer fue creado por Breitling en 1952 para la Asociación Estadounidense de Propietarios y Pilotos de Aeronaves, cuyo logo aparece en el nuevo modelo de edición limitada a las 12 horas.
El director general de Breitling, Georges Kern, llegó a la firma hace cinco años aportando aire fresco y con una visión que aúna tradición, estilo y vanguardia. En una reciente entrevista confesó que no lanzaría «un producto por muy bonito que sea sin una narrativa». El reloj Boeing 747, sin duda, nace con esta premisa. «Qué mejor manera de recordar un jumbo jet revolucionario que con un cronógrafo de piloto revolucionario».
«El Boeing 747 llevó el estilo al cielo, al igual que el Navitimer llevó el espíritu de la aviación a los entusiastas de los relojes conocedores de estilo», señala Georges Kern.
