Uno de los rincones más icónicos de la ciudad de Londres es, sin ninguna duda, Harrods. La belleza de estos grandes almacenes, punto de encuentro de los amantes del lujo, no dejan indiferentes a nadie. Además, forman parte de la ruta de tiendas cuando visitamos la capital de Reino Unido. Pero Harrods no solo lo encontramos aquí, también traspasa fronteras. Ahora encontramos un trocito de Londres en Doha, la capital de Qatar.
Cuando decimos que es un trocito es porque por un momento, parece que estamos en Europa. En Qatar ha abierto sus puertas Harrods Tea Rooms Doha de la mano de Qatar Duty Free, «en el exquisito entorno de Mshreib Downtown, en el corazón de Doha». Un lugar muy especial porque es la mayor plaza al aire libre de Oriente Medio y del norte de África. «Este nuevo restaurante de Harrods Doha lleva el legado y la tradición del té al centro de Mshreib, además, ofrecerá a los clientes uno de los mejores tés del mundo. Y no solo eso, también existirá una selección de los mejores manjares», explican.
Este menú incluirá desde pequeños sándwiches a scones recién horneados, además de pastelitos para acompañar el té, como los icónicos Harrods Custard Cream 0 el Cherry Bakewell. Todos ellos horneados por los chefs de Harrods. Todo está inspirado, eso sí, en ese clásico menú que acompaña el Afternoon Tea, ese momento que forma parte de la cultura popular inglesa y que en este caso traspasa fronteras.
Harrods lleva ofreciendo este ritual desde 1911, cuando abrió las puertas de su restaurante en la cuarta planta: The Georgian Restaurant. La esencia de este lugar queda patente en este trocito de Londres en Doha, ya que tiene inspiración art decó. Telas de colores, mármoles, azulejos en la escalera que emulan pavos reales… Parece que por un momento estamos en Knightsbridge.
Foto: @harrods
Lo de parecer que estás en Londres es literal, aunque cada uno de los rincones que tiene Harrods por el mundo también recuerdan donde están. En realidad hay una mezcla de ambos mundos. Hasta los icónicos ‘Hombres Verdes’ de Harrods estarán en la puerta para recibirte. Solo faltará el Big Ben dando la hora.