Si no te apetece hacer las maletas para irte de fin de semana, pero buscas romper con la rutina, el 12 de octubre es la excusa perfecta para escapar a menos de dos horas de Madrid y disfrutar de una comida en lugares únicos. Desde Epílogo, en Tomelloso, que te sumerge en la historia del Guadiana con cada bocado, pasando por el nuevo Essentia, en una finca de Toledo, o Molino de Alcuneza, en Sigüenza, que te hace viajar en el tiempo. Localizamos cinco restaurantes únicos con una gastronomía de diez que te animarán a salir de la ciudad para ir a comer y volver en el día.
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Epílogo, Ciudad Real, una oda al Guadiana
En Tomelloso se encuentra un auténtico refugio gastronómico donde deleitar el paladar. Se trata de Epílogo, alta cocina con un Sol Repsol. El chef Rubén Sánchez-Camacho presenta esta temporada Historias del Guadiana, un menú con ingredientes y técnicas ancestrales de todos los territorios por los que discurre el río: Castilla-La Mancha, Extremadura, Andalucía, Alentejo y Algarve. El más completo incluye 17 platos y dos postres (el reducido es de ocho pases), con propuestas innovadoras como el torrezno de cangrejo y el sashimi de jabalí, los cuales resaltan la fusión entre vanguardia y tradición. Toma nota, sólo abre al medio día.
Molino de Alcuneza, Sigüenza, un estrella Michelin
Ir a comer a Molino de Alcuneza (Guadalajara) este 12 de octubre es un plan perfecto por varias razones. El restaurante, que se encuentra dentro de un impresionante Relais & Châteaux, cuenta con una estrella Michelin y cuatro Soles Repsol y ofrece una experiencia gastronómica de alta calidad, fusionando la cocina tradicional castellana con toques contemporáneos.
Aprovechando el día festivo, puedes disfrutar de un menú cuidadosamente elaborado por los hermanos Blanca y Samuel, basado en productos de temporada y locales. Además, la ubicación en un entorno medieval como Sigüenza, con su castillo y catedral, hace que la experiencia sea no sólo culinaria, sino también cultural. Perfecto para una escapada gastronómica y turística en el Día de la Hispanidad.
Essentia, Toledo, templo de la parrilla
En un enclave idílico, a tan sólo cinco kilómetros de Toledo, se encuentra Finca Las Nieves donde el chef Toño Navarro despliega su savoir faire. Su propuesta gastronómica, al igual que el restaurante de Tarancón (Cuenca), se fundamenta en la temporalidad y el producto, donde la carne a la parrilla es la máxima. Chuletillas de cordero, solomillo de vaca rubia gallega o vaca vieja finlandesa de raza Ayshire. Tampoco falta el producto de mar, que varía a diario según la temporada y la disponibilidad del mercado.
La Fundición, Segovia, cocina de autor
«Cocina de autor con deliciosos matices de sabor», así es como el restaurante define su cocina donde destaca. Así que sí, en Segovia hay vida más allá del cochinillo de Lechal, gracias al chef Aníbal Herrero. Y si la gastronomía es de diez, el lugar también, pues se trata de la antigua plomería del Real Sitio. Además, se encuentra en un lugar privilegiado, en el centro de La Granja a escasos minutos del Palacio real por lo que después de comer, nada mejor que darse un paseo por los jardines.
Casas Colgadas, Cuenca, entorno y cocina única
El Restaurante Casas Colgadas en Cuenca es uno de los lugares más emblemáticos y únicos de la ciudad. Ubicado en una de las famosas Casas Colgadas, construcciones medievales que literalmente parecen colgar de los acantilados sobre el río Huécar, el restaurante combina historia, gastronomía y vistas espectaculares. En la carta se encuentran platos con una tradicional manchega y toques contemporáneo. Detrás de ellos, se encuentra el prestigioso chef Jesús Segura.
