Disfrutar de una jornada de otoño en La Granja de San Ildefonso es uno de los mejores planes que se puede hacer, cuando la vegetación se ha teñido del color del café y su majestuoso palacio tiene un ambiente bucólico. Este Real Sitio, de los más bellos y a solo 77 kilómetros de Madrid, bien merece una visitar y disfrutar de una comida cerca. Porque La Granja de San Idelfonso -de la que se enamoró Felipe V, primer Borbón- es considerado Conjunto Histórico Nacional. Después de disfrutar del palacio y de los Jardines de La Granja, no hay nada como disfrutar de sus judiones, de cualquier otro plato de cuchara o de lo bueno que ofrece los restaurantes de la zona. Aquí tres de los mejores restaurantes de la localidad segoviana de La Granja de San Ildefonso
La Fundición
En la Plazuela de Calandria, muy cerca del palacio, encontramos La Fundición… Otro de los restaurantes más recomendado en La Granja de San Ildefonso. Se encuentra, de hecho, en el Real Sitio, porque en su ubicación se encontraba la antigua plomería. De ahí su nombre. El edificio data de entre 1722 y 1723. Algunos elementos aún persisten, como la plancha de madera gemela, que ahora es una de las mesas de la zona del bar.
En el corazón de la plomería -además del resto de salas interiores, una de ellas fue la sala de enfermería del antiguo hospital- es donde podemos disfrutar de sus fogones. Platos de siempre con una vuelta de tuerca, todo con el sello del chef de La Fundición, Aníbal Herrero.
Parador de La Granja
El último de los mejores restaurantes de esta localidad segoviana. Ubicado en la Casa de los Infantes encontramos el Parador de la Granja de San Ildefonso. Es un antiguo palacio del siglo XVIII, construido bajo el reinado de Carlos III. Se puede dormir en alguna de sus habitaciones, por supuesto, pero nosotros te recomendamos su restaurantes para disfrutar de la cocina regional segoviana.
Su restaurante se llama Puerta de la Reina, «estamos especializados en en la genuina cocina segoviana», explican. Para una jornada de otoño, nada como sus deliciosos guisos y asados de carne. Aunque eso sí, es la cocina de siempre con un toque innovador. Por supuesto, hay que pedir sus judiones. ¿De postre? Ponche segoviano.
Reina XIV
«Somos un restaurante de cocina tradicional castellana», explican. Por lo que no fallan los judiones de la Granja o el cochinillo o el cordero lechal, platos de siempre. Llevan desde 1994 ofreciendo lo mejor de sus fogones, «respetando los sabores auténticos de los platos sin aderezos fuera de los corrientes», defienden. Además, está recomendado por la guía Michelín.
Además de los platos antes descritos, no fallan sus escabeches caseros de bonito o perdiz, sus pescados -cuya guarnición de verdura cambia, en función de la temporada-… Todo acompañado de una bodega interesante. La comida no puede finiquitar sin disfrutar algunos de sus postres caseros, como las empanadillas fritas de crema o el flan tradicional según la receta de la abuela Hilaria.
