María Pombo se ha convertido en una de las más exitosas empresarias. Uno de sus negocios más rentables no tiene que ver con la moda ni con las redes sociales, sino con un plato tan tradicional como querido: la tortilla de patatas. La Martinuca, la marca de tortillas de patatas en la que participa junto a su amiga Natalia Coll y otros socios, ha arrasado en Madrid y Barcelona, consolidándose como un referente gastronómico. Hoy, Día Internacional de la Tortilla de Patatas, te descubrimos la tortilla que más factura.
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Hace unos meses, en COOL hablamos con Natalia Coll, quien ya nos adelantaba el éxito que estaba cosechando el proyecto. «La Martinuca nace de una idea tan simple como extraordinaria: reivindicar el legado cultural de la tortilla de patatas, ese plato que nos une a todos los españoles. Mi amigo Viti, Víctor Naranjo, compartió con nosotros la idea y la receta de su abuela Martina y, desde ese momento, supimos que estábamos ante algo especial. Junto a Viti, Adrián, Álvaro, María Pombo y Pablo decidimos crear algo más que una marca: un movimiento que elevara el que es el plato icónico de nuestra gastronomía», nos contaba.
El crecimiento de La Martinuca ha sido imparable. En el podcast Act2ality, María Pombo reveló que este negocio se ha convertido en el más rentable de todos los que tiene: «Los márgenes son más sencillos. Al ser comida, hay más beneficios que con una marca de ropa. En La Martinuca hemos facturado este último año casi 3,5 millones de euros y recibimos 3.000 pedidos a la semana».

El éxito de La Martinuca no sólo se basa en la calidad de sus tortillas, sino en la estrategia de negocio que hay detrás. La combinación de una receta casera con una buena gestión empresarial y una comunicación eficaz en redes sociales ha sido clave para posicionar la marca en el mercado.
Además, la implicación de socios con gran visibilidad pública, como María Pombo y Pablo Castellano, ha ayudado a viralizar el proyecto y atraer a un público cada vez más amplio.
Hay distintas variedades de tortillas de patata, como de chorizp, cántabra, foie, con o sin cebolla… y los precios oscilan ente los 15,50 € y los 19,90 € (la individual). Ya nos lo adelantó Natalia en su día: «Nuestra filosofía es clara: la tradición es la base, pero la innovación es el puente hacia el futuro. Mantenemos el corazón de la receta tradicional porque sabemos que la tortilla debe tener ese sabor a casa. Sin embargo, exploramos nuevas combinaciones de ingredientes y formatos que despiertan la curiosidad y emocionan a nuestros clientes. Es un equilibrio entre respeto y creatividad, y cada tortilla que hacemos lleva esa dualidad como su sello diferenciador».

Lo que empezó como una idea entre amigos se ha convertido en un fenómeno gastronómico. La Martinuca no solo celebra la tradición de la tortilla de patatas, sino que la moderniza y la lleva a nuevas audiencias. Y con un crecimiento tan acelerado, todo apunta a que esta tortilla seguirá dando mucho de qué hablar.