«No hay verano sin beso» es una de las frases más famosas del Mediterráneo. Y no estamos hablando del beso con la b en minúscula… Estamos hablando de Beso con mayúscula, Beso Beach, el beach club más famoso de Formentera con sedes en Ibiza, Mallorca, Sitges o Estepona. El chiringuito de lujo con la filosofía más mediterránea se expande por el litoral llegando a Barcelona de la mano de Meliá. El grupo mallorquín y el grupo nacido en Formentera se dan la mano con la apertura de este chiringuito en lo más alto de la Diagonal, por eso se llama Beso Pedralbes. En los jardines de la Torre Melina Gran Meliá encontramos el place to be de la Ciudad Condal.
En la zona alta de Barcelona
«Ubicado en los exuberantes jardines del icónico Torre Melina, Beso Pedralbes se convierte en un oasis inédito en la zona para desconectar del ritmo de la ciudad y disfrutar de una experiencia culinaria de alto nivel. De espíritu bohemio, casual y exclusivo, y rindiéndose a la belleza natural del entorno, invita a los comensales a sumergirse en una atmósfera única» explican desde el grupo Meliá acerca de esta nueva apertura.
Beso Pedralbes, en la zona más alta de Barcelona, se convierte en un trocito de Formentera. En los jardines del antiguo hotel Juan Carlos I, ahora Torre Melina Gran Meliá, ocupa la zona exterior y cuenta con su propia playa. A sus alrededores: maravillosas camas balinesas, hamacas para tomar el sol y diferentes rincones para disfrutar de la gastronomía. Porque sí, a Beso Pedralbes, como a Beso Beach Formentera, se viene a pasarlo bien pero también a comer de lujo. Aunque esté el mar lejos, casi nos da la sensación de estar escuchándolo.
La oferta gastronómica
“Escogemos la materia prima de nuestros platos con cariño y amor. Cocina local con matices vascos que dan como resultado algo único”, explican desde Beso Beach. La propuesta gastronómica destaca cómo en todos sus chiringuitos: por sus fantásticas carnes, que se pudieron disfrutar en su inauguración hace unas semanas, su ya famoso arroz de carabineros, sus mejillones o sus rabas de bogavante. Todo disfrutado con la mejor música de los mejores Djs del Mediterráneo, que ahora tienen otro chiringuito en el que pinchar, junto al mar, pero esta vez, en la parte alta.
¿Lo mejor? Que de Beso Pedralbes no solo disfrutarán los barceloneses que quieran acudir a su afterwork o a sus cenas y comidas de fin de semana. Al estar en el jardín de uno de los mejores hoteles de lujo de Barcelona, Torre Melina Gran Meliá, sus propios huéspedes podrán sentir que están en Formentera bajando al hall del hotel y adentrándose por el camino que lleva a los árboles. El place to be de la Ciudad Condal se encuentra a escasos metros de su habitación con, por cierto, una de las vistas más fantásticas de Barcelona.
«Beso Pedralbes se propone ofrecer una experiencia completa que incluye música en vivo, DJs y entretenimiento en todos los rincones. Mientras la zona de piscina exterior representa en un espacio lounge perfecto para disfrutar de un ambiente animado y cosmopolita bajo el sol, por la noche, la terraza se transforma en un lugar mágico, con música en vivo y un ambiente ideal para refrescarse con un cóctel y disfrutar de una velada inolvidable» explican desde Meliá. Así lo reiteran Rafa Viar y Angie López, fundadores de este proyecto familiar que nació en la playa de Cavall d’en Borras de Formentera… Y que han abierto chiringuito urbano en Barcelona porque: «Beso va donde la tribu se lo pide». El nuevo hotel de lujo de la ciudad y el place to be de Barcelona, están en lo más alto de la Diagonal.
